viernes, 28 de noviembre de 2014

ZACARIAS 8:21 FUTURA PAZ Y PROSPERIDAD DE SION

Zacarías 8:21 La Biblia de las Américas (LBLA) Futura paz y prosperidad de Sion 8 Y vino la palabra del SEÑOR de los ejércitos, diciendo: 2 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “He celado a Sion con gran celo, sí, con gran furor la he celado.” 3 Así dice el SEÑOR: “Volveré a Sion y en medio de Jerusalén moraré. Y Jerusalén se llamará Ciudad de la Verdad[a], y el monte del SEÑOR de los ejércitos, Monte Santo.” 4 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “Aún se sentarán ancianos y ancianas en las calles[b] de Jerusalén, cada uno con su bastón en la mano por causa de sus muchos días. 5 “Y las calles[c] de la ciudad se llenarán de muchachos y muchachas que jugarán en sus calles[d].” 6 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “Si en aquellos días esto parece muy difícil[e] a los ojos del remanente de este pueblo, ¿será también muy difícil[f] a mis ojos?” —declara el SEÑOR de los ejércitos.7 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “He aquí, salvaré a mi pueblo de la tierra del oriente[g]y de la tierra donde se pone el sol; 8 y los traeré y habitarán en medio de Jerusalén; y ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios en verdad[h] y en justicia.” 9 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “Sean fuertes vuestras manos, vosotros que escucháis en estos días estas palabras de la boca de los profetas, los cuales hablaron el día en que se pusieron los cimientos de la casa del SEÑOR de los ejércitos para la reedificación del templo. 10 “Porque antes de aquellos días no había paga para hombre ni paga para el ganado; y no había paz[i] para el que salía o entraba a causa del enemigo[j], y yo puse a todos los hombres unos contra otros. 11 “Pero ahora yo no trataré al remanente de este pueblo como en los días pasados” —declara el SEÑOR de los ejércitos. 12 “Porque habrásimiente de paz: la vid dará su fruto, la tierra dará su producto y los cielos darán su rocío; y haré que el remanente de este pueblo herede todas estas cosas. 13 “Y sucederá que como fuisteis maldición entre las naciones, casa de Judá y casa de Israel, así os salvaré para que seáis bendición. No temáis, mas sean fuertes vuestras manos.” 14 Porque así dice el SEÑOR de los ejércitos: “Tal como me propuse haceros mal cuando vuestros padres me hicieron enojar” —dice el SEÑOR de los ejércitos— “y no me he arrepentido, 15 así me he propuesto en estos días volver a hacer bien a Jerusalén y a la casa de Judá. ¡No temáis! 16 “Estas son las cosas que debéis hacer: decid la verdad unos a otros, juzgad con verdad y con juicio de paz en vuestras puertas[k], 17 no traméis en vuestro corazón el mal uno contra otro, ni améis el juramento falso; porque todas estas cosas son las que odio” —declara el SEÑOR. 18 Entonces la palabra del SEÑOR de los ejércitos vino a mí, diciendo: 19 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “El ayuno del cuarto mes, el ayuno del quinto, el ayuno del séptimo y el ayuno del décimo se convertirán para la casa de Judá en gozo, alegría y fiestas alegres[l]. Amad, pues, la verdad y la paz.” 20 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “Y será que aun vendrán pueblos y habitantes de muchas ciudades; 21 y los habitantes de una irán a otra, diciendo: ‘Vamos sin demora a implorar el favor[m] del SEÑOR, y a buscar al SEÑOR de los ejércitos. Yo también iré.’ 22 “Y vendrán muchos pueblos y naciones poderosas a buscar alSEÑOR de los ejércitos en Jerusalén y a implorar el favor del SEÑOR.” 23 Así dice el SEÑOR de los ejércitos: “En aquellos días diez hombres de todas las lenguas de las naciones asirán[n]el[o] vestido de un judío, diciendo: ‘Iremos con vosotros, porque hemos oído que Dios está con vosotros.’” Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – UNA NUEVA GENERACION Pasaje clave: Deuteronomio 1 al 3. El pueblo estaba a un paso de cruzar el río Jordán y de entrar a Canaán. 40 años dieron vueltas por el desierto por problemas de desobediencia y rebeldía. Todos aquellos quejosos, incrédulos y rebeldes habían muerto. Ahora eran sus hijos (la nueva generación) quienes iban a cumplir el propósito de Dios de conquistar y habitar la tierra que Él les había prometido. De los que habían salido de Egipto cuarenta años atrás solamente quedaban tres: Moisés, Josué y Caleb, pero solo dos de ellos cruzarían el río con la nueva generación. El otro, el más anciano, aunque lleno de vitalidad y fuerzas, el que había dirigido (y soportado) al pueblo durante todos aquellos años, el que había recibido los mandamientos y las leyes de Dios, el que hablaba con Dios cara a cara como con un amigo, el que había sido fiel en todo, el que más de una vez había rogado por el pueblo para que no sea destruido, él moriría en aquel desierto en los próximos meses, sin poder disfrutar lo que más anhelaba: entrar a la tierra prometida. Su mayor sueño, su deseo más grande no le sería concedido por Dios. Moisés le había pegado a la roca en vez de hablarle. Así de simple. Así de terminante. Se dejó llevar por la locura de los demás y perdió lo que más anhelaba tener. Le rogó a Dios pero la decisión ya había sido tomada: otro ocuparía su lugar (3:23 al 29). Aún así, Moisés no se rebeló ni protestó contra Dios. Habiendo perdido lo que más anhelaba se mantuvo fiel a la decisión divina. No malgastó su tiempo echándose la culpa por su error ni enojándose contra otros. No se trató a sí mismo de fracasado por no poder entrar a la Tierra Prometida. Cometió un error, tuvo un fracaso, pero él no era un fracasado, todo lo contrario, había logrado con éxito la misión que Dios mismo le había encomendado 40 años atrás. Y como sabía que no le quedaba mucho tiempo de vida, tomó la decisión de invertirlo de la mejor manera. ¿Cómo? ¿Qué hizo? Muy simple: Le enseñó a la nueva generación. Los aconsejó, los animó, les advirtió, les recordó, les dio todo lo que él había recibido de Dios. Toda la enseñanza, todos los mandamientos, todas las prohibiciones, bendiciones y castigos que Dios les había revelado en la Ley. Los desafió a creer, a obedecer. Los desafió a renunciar a sus viejos ídolos y a no llenar el corazón con ninguno nuevo. Los animó a ser conquistadores de todo lo que Dios había preparado para ellos. Los alentó a no vivir de recuerdos del pasado para que fueran capaces de disfrutar todo lo nuevo que estaba por llegar. Es como si les dijera: “Lo que hicimos y vivimos antes pudo haber sido muy bueno, o muy feo, pero es mucho mejor lo que viene”. ¿Entiendes? Esta es una palabra para ti: Lo que viviste y vivimos hasta aquí pudo haber sido muy bueno, o regular o muy malo y triste, pero ya pasó. Lo que viene es muchísimo mejor. Aunque no llegue a ser como nosotros lo esperamos, será mejor, será más excelente, si le permitimos a Dios que nos sorprenda. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Refugio Samuel Langhorne Clemens, más conocido como Mark Twain, fue un escritor nacido en Florida, Misuri, Estados Unidos. Escribió obras muy exitosas como “El príncipe y el mendigo”, “Las aventuras de Tom Sawyer” y “Las aventuras de Huckleberry Finn.” Todo comenzó en 1847, al cumplir los 11 años Mark dejó la escuela para comenzó a trabajar en la imprenta de un periódico local. Poco a poco llegó a cargos más importantes, a los 19 años, por primera vez, publicó en el mismo periódico algunas tiras cómicas y relatos de viajes. Pero no fue sino hasta 1876 cuando logró consolidarse como un escritor de renombre. Los laureles lo perseguían por doquier y sus ingresos eran bastante altos. Sin embargo, toda esa fama nunca evitó que se enfrentara a diversos problemas, por ejemplo: Nunca fue un administrador eficiente y sus inversiones nunca dieron resultado haciendo que sufra grandes pérdidas, tuvo que enterrar a varios de sus seres queridos y al convertirse en un firme partidario de la abolición de la esclavitud, logró conseguir más enemigos y el abandono de muchos de sus amigos. En esos momentos de pena y dolor, Mark se refugiaba en la lectura de libros de historia, filosofía y poesía. En algunos comentarios de su vida, él mismo reconoció que su pensamiento cambió y se desarrolló a lo largo de su vida con el apoyo de grandes escritores amigos. Uno de estos comentarios escrito por él en un periódico local decía: “Cuando terminé la lectura del libro “la Revolución Francesa” escrita por Carlyle en 1871, yo era semejante a la sociedad acomodad; cada vez que lo he vuelto a leer, veo todo de forma diferente. He sido influenciado y he cambiado, poco a poco, por la vida y el entorno, y ahora cojo el libro una vez más, ¡y reconozco que soy pobre! Pero no pobre debilucho o de poco carácter, sino uno fuerte.” La revolución francesa fue el principio de muchas otras revoluciones que seguirán su ejemplo. Pero el relato de cada historia individual, de cada vida que participó en ella, fue lo que inspiraba Mark cuando ya no tenía fuerzas, cuando sentía que estaba al borde de la banca rota, cuando era invadido por la pena de cada familiar que enterraba, cuando los amigos lo abandonaban o cuando reciba amenazas por defender sus ideales. En esos momentos encontró refugio en las valientes historias que leía. Eran como un refugio. Muchos libros a los largo de la historia motivaron a hombres de todas las clases sociales; desde los que leen en la comodidad de un escritorio, hasta los que hojean viejas paginas dentro de un calabozo. La fuerza que se encuentra en cada palabra puede cambiar el modo de pensar de quien hace suyas esas palabras. Pero entre tantos libros escritos, la biblia se destaca por ser el único libro que continúa siendo actual con el paso del tiempo, sigue siendo moralmente correcta, literariamente exquisita y científicamente sin errores. Por incontables generaciones, al hojear sus páginas y describir a Dios hablando entre cada escrito, el hombre no sólo han encontrado una motivo de inspiración, sino que han experimentado un cambio radical en sus vidas. En otras palabras: Sigue siendo el mejor refugio para quien necesita fuerza, dirección, libertad, ánimo y consuelo. “Simón Pedro le contestó: Señor, ¿a quién podemos ir? Tus palabras son palabras de vida eterna.” Juan 6:68 Versión DHH Héctor Colque CVCLAVOZ

jueves, 27 de noviembre de 2014

ISAIAS 2:3 REINO UNIVERSAL DE DIOS Y SU JUICIO

Isaías 2:3 La Biblia de las Américas (LBLA) Reinado universal de Dios y su juicio 2 Lo que[a] vio Isaías, hijo de Amoz, concerniente a Judá y Jerusalén. 2 Y acontecerá en los postreros días, que el monte de la casa del Señor será establecido como[b] cabeza de los montes; se alzará sobre los collados, y confluirán a él todas las naciones. 3 Vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, subamos al monte del Señor, a la casa del Dios de Jacob; para que nos enseñe acerca de sus caminos, y andemos en sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley[c], y de Jerusalén la palabra del Señor. 4 Juzgará entre las naciones, y hará decisiones por[d] muchos pueblos. Forjarán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en podaderas. No alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra. 5 Casa de Jacob, venid y caminemos a la luz del Señor. 6 Ciertamente has abandonado a tu pueblo, la casa de Jacob, porque están llenos de costumbres del oriente, son adivinos como los filisteos, y hacen tratos[e] con hijos de extranjeros. 7 Se ha llenado su tierra de plata y de oro, y no tienen fin sus tesoros; su tierra se ha llenado de caballos, y no tienen fin sus carros. 8 También su tierra se ha llenado de ídolos; adoran la obra de sus manos, lo que han hecho sus dedos. 9 Ha sido humillado el hombre común, y ha sido abatido el hombre de importancia; pero no los perdones. 10 Métete en la roca, y escóndete en el polvo del terror del Señor y del esplendor de su majestad. 11 La mirada altiva[f] del hombre será abatida, y humillada la soberbia de los hombres; el Señor solo será exaltado en aquel día. 12 Porque el día del Señor de los ejércitos vendrá contra todo el que es soberbio y altivo, contra todo el que se ha ensalzado, y será abatido. 13 Y esto será contra todos los cedros del Líbano altos y erguidos, contra todas las encinas de Basán, 14 contra todos los montes encumbrados, contra todos los collados elevados, 15 contra toda torre alta, contra toda muralla fortificada, 16 contra todas las naves de Tarsis y contra toda obra de arte preciada. 17 Será humillado el orgullo del hombre y abatida la altivez de los hombres; el Señor solo será exaltado en aquel día, 18 y los ídolos desaparecerán por completo. 19 Se meterán los hombres en las cuevas de las rocas y en las hendiduras de la tierra[g], ante el terror del Señor y ante el esplendor de su majestad, cuando El se levante para hacer temblar la tierra. 20 Aquel día el hombre arrojará a los topos y a los murciélagos, sus ídolos de plata y sus ídolos de oro que se había hecho para adorarlos; 21 y se meterá[h] en las cavernas de las rocas y en las hendiduras de las peñas, ante el terror del Señor y ante el esplendor de su majestad, cuando El se levante para hacer temblar la tierra. 22 Dejad de considerar al[i] hombre, cuyo soplo de vida está en su nariz; pues ¿en qué ha de ser él estimado? Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – PATEANDO EN CONTRA 2 Pasaje clave: Números 32. Patear en contra de los deseos de Dios. El deseo de Dios para el pueblo de Israel era introducirlos en la tierra prometida. Darles una nueva tierra por heredad y bendecirlos. Sin embargo dos tribus y media patearon en contra del deseo de Dios ¿Qué deseaban las tribus de Rubén, Gad y la media tribu de Manasés y por qué? (32:1 al 5). A Moisés no le agradó la propuesta de estas tribus. Él conocía el deseo de Dios. Moisés sabia que la tierra a la que iban era muchísimo mejor que la que deseaban ellos. Aunque ahora no lo supieran ésta elección les traería graves problemas en el futuro. Aún así, por su terquedad, Dios les concedió lo que deseaban. Piénsalo. Los deseos de Dios son buenos para nuestras vidas. Él no desea egoístamente. Él no desea nada malo ni caprichoso en contra nuestro. Su corazón nos ama profundamente. Sus deseos son lo mejor para nosotros. ¿Cómo podemos ser tan tercos en pensar o sentir que nuestros propios deseos son mejores que los de Dios cuando ni siquiera sabemos qué va a suceder con nuestras vidas en los próximos cinco minutos? Dios, en cambio, conoce hasta el día de nuestra muerte y aún más allá. ¿Podrá equivocarse, errarle o meter la pata en su proyecto para nuestras vidas? ¡No! Absolutamente no. ¿Cuáles son las cosas que más deseas? ¿Es lo mismo que Dios desea para ti? No te encapriches en tus propios deseos si no es lo que Dios desea, porque aunque Él no lo apruebe puede dártelo igualmente, pero el precio que pagarás será demasiado alto. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION ¿Cuántos años vivirás? Se cuenta que en una oportunidad, don Máximo Daglio, un hombre que a pesar de sus años avanzados trabajaba con mucho empeño de la obra del Señor, se encontró en la calle con una gitana que le quiso adivinar la suerte. Creyéndolo presa fácil, la mujer le dijo: - Abuelo, ¿quiere que le diga cuántos años va a vivir? A esta pregunta don Máximo respondió con otra: - ¿Y usted cuánto piensa vivir? - ¿Yo? – contestó la mujer- ¡Ah, espero vivir hasta los setenta! - En cambio yo- dijo don Máximo- sé con toda seguridad que voy a vivir para siempre. La gitana le echó una mirada lastimosa, pensando sin duda que el pobre anciano ya no estaba en del todo en sus cabales. Cuando ya se disponía a partir en busca de un mejor cliente, don Máximo agregó: - Si le digo a usted que viviré para siempre, es porque Jesús nos dejó esta promesa: “De cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida” (Juan 5:24) Te has preguntado alguna vez, ¿cuántos años vas a vivir? Lo cierto es que el único que conoce el número de nuestros años en la tierra es Dios. Todos vamos a enfrentar la muerte algún día, más tarde o más temprano pero todos pasaremos por eso porque tan sólo somos peregrinos y extranjeros en la tierra. Lo que realmente importa es si estás preparado para la eternidad, si has estado viviendo una vida recta delante de Dios y de los hombres, si has reconocido que sólo Jesús puede darte la salvación y vida eterna que necesitas. Nadie quiere pensar en la muerte y muchos le temen porque desconocen qué hay después de la vida pero, si como don Máximo, tenemos la certeza y creemos en la promesa de Jesús, podemos vivir confiados de que este tiempo es de preparación, de tránsito y que no moriremos nunca. “Los que viven solo para satisfacer los deseos de su propia naturaleza pecaminosa cosecharán, de esa naturaleza, destrucción y muerte; pero los que viven para agradar al Espíritu, del Espíritu, cosecharán vida eterna”. Gálatas 6:8 (NTV) No te preocupes tanto por las cosas terrenales y pon tu vida a cuentas con Dios y has su voluntad porque la eternidad te fue prometida. Ana María Frege Issa CVCLAVOZ

miércoles, 26 de noviembre de 2014

SALMO 132:7 PLEGARIA POR EL SANTUARIO

Salmos 132:7 La Biblia de las Américas (LBLA) Plegaria por el santuario Cántico de ascenso gradual[a]. 132 Acuérdate, Señor, de David, de toda su aflicción; 2 de cómo juró al Señor, y prometió al Poderoso de Jacob: 3 Ciertamente no entraré en[b] mi casa, ni en mi lecho me acostaré[c]; 4 no daré sueño a mis ojos, ni a mis párpados adormecimiento, 5 hasta que halle un lugar para el Señor, una morada[d] para el Poderoso de Jacob. 6 He aquí, oímos de ella en Efrata; la hallamos en los campos de Jaar[e]. 7 Entremos a sus moradas; postrémonos ante el estrado de sus pies. 8 Levántate, Señor, al lugar de tu reposo; tú y el arca de tu poder. 9 Vístanse de justicia tus sacerdotes; y canten con gozo tus santos. 10 Por amor a David tu siervo, no hagas volver el rostro de tu ungido. 11 El Señor ha jurado a David una verdad de la cual no se retractará: De tu descendencia[f] pondré sobre tu trono. 12 Si tus hijos guardan mi pacto, y mi testimonio que les enseñaré, sus hijos también ocuparán[g] tu trono para siempre. 13 Porque el Señor ha escogido a Sion; la quiso para su habitación. 14 Este es mi lugar de reposo para siempre; aquí habitaré, porque la he deseado. 15 Su provisión bendeciré en abundancia; de pan saciaré a sus pobres. 16 A sus sacerdotes también vestiré de salvación, y sus santos darán voces de júbilo. 17 Allí haré surgir el poder[h] de David; he preparado una lámpara para mi ungido. 18 A sus enemigos cubriré de vergüenza, mas sobre él resplandecerá su corona. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – PATEANDO EN CONTRA 1 Pasaje clave: Números 31. Pateando en contra de las órdenes de Dios. La orden de Dios fue terminante: maten a todos los madianitas. Por causa de ellos, los muchachos “calentones” de Israel, habían provocado la ira de Dios y perjudicado a todo el pueblo. Sin embargo, los capitanes patearon en contra dejando con vida a todas las mujeres. ¿Habrán pensado en volver a repetir la “fiestita” que habían tenido unos meses atrás? Y… tal vez… Esta actitud despertó todo el enojo de Moisés. Sin pelos en la lengua, les recordó que por consejo de Balaam (sí, el menos espiritual que un asno) ellas los habían seducido y arrastrado hacia el sexo y los demonios. Y les recordó cómo Dios los había castigado severamente. Ahora debían terminar el trabajo: matar a todas las mujeres que se habían “auto regalado” (excepto a las vírgenes) y purificarse durante una semana antes de volver a entrar al campamento. Patear en contra de una orden recibida es lo mismo que desobedecer, rebelarse o ser tercos. Piénsalo. ¿Contra quién o quienes “pateas en contra”? Ser terco u obstinado, ¿te beneficia en algo? ¿Te bendice? ¿No probaste otras alternativas? Como por ejemplo, ¿obedecer sin quejarte?, o ¿dar tu opinión y decir lo que piensas pero obedecer igualmente? Lo peor de patear en contra es siempre terminas perjudicándote a ti mismo. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Paz interior Muchos buscamos tener paz en medio de los problemas cuando en realidad, la paz está al alcance de todos y en todo momento. Las tres maneras en que uno puede hallar la paz que sólo Dios da son: pensar correctamente, actuar honestamente y vivir rectamente. Dios nos dio pautas para saber actuar y poder luchar y combatir contra cualquier cosa que nos quiera quitar la paz interior y que además nos permita salir victoriosos de toda prueba. Tal vez la gente pensaría que uno no tiene problemas o que no le interesa lo que ocurre a su alrededor porque lo ven con una sonrisa, cuando en realidad es la paz de Dios la que hace que tengamos tranquilidad y confianza de que todo está en su control. Pablo decía que paz no es la ausencia de problemas si no la presencia de Dios en nuestros problemas. Esto es algo muy cierto pues si tenemos esa fe y seguridad de que nada podrá destruirnos y que somos hijos de Dios, nada quitará esa sonrisa que Él puso en nosotros. La Palabra de Dios nos dice “Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo” Romanos 5:1 (RVR 1960) La conciencia es un arma muy poderosa que Dios usa para que nosotros tengamos esa intranquilidad, cuando hacemos algo malo no podemos conciliar el sueño ni disfrutar los buenos momentos porque hay algo que nos atormenta. Lamentablemente hay muchas personas que ya no tienen esa conciencia y no sienten nada de remordimiento por lo que hacen, esto produce el endurecimiento del corazón. ”Y por esto procuro tener siempre una conciencia sin ofensa ante Dios y ante los hombres” Hechos 24:16 (RVR 1960) No esperes llegar a ese estado. Toma conciencia de todo lo malo que has hecho, ponte a cuentas con Dios y permite que en tus problemas se haga presente la paz. Dios estará contigo dándote la salida la respuesta y la tranquilidad que tu alma necesita. Telma Céspedes CVCLAVOZ

martes, 25 de noviembre de 2014

SALMO 95:6 ALABANZA AL SEÑOR Y ADVERTENCIA CONTRA LA INCRDULIDAD

Salmos 95:6 La Biblia de las Américas (LBLA) Alabanza al Señor y advertencia contra la incredulidad 95 Venid, cantemos con gozo al Señor, aclamemos con júbilo a la roca de nuestra salvación. 2 Vengamos ante su presencia con acción de gracias[a]; aclamémosle con salmos[b]. 3 Porque Dios grande es el Señor, y Rey grande sobre todos los dioses, 4 en cuya mano están las profundidades de la tierra; suyas son también las cumbres de los montes. 5 Suyo es el mar[c], pues El lo hizo, y sus manos formaron la tierra firme[d]. 6 Venid, adoremos y postrémonos; doblemos la rodilla ante el Señor nuestro Hacedor. 7 Porque El es nuestro Dios, y nosotros el pueblo de su prado[e] y las ovejas de su mano. Si oís hoy su voz[f], 8 no endurezcáis vuestro corazón como en Meriba[g], como en el día de Masah[h] en el desierto, 9 cuando vuestros padres me tentaron, me probaron, aunque habían visto mi obra. 10 Por cuarenta años me repugnó aquella generación, y dije: Es un pueblo que se desvía[i] en su corazón y no conocen mis caminos. 11 Por tanto, juré en mi ira: Ciertamente no entrarán en mi reposo. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – ¡QUE FIESTITA, NENAS! Pasaje clave: Números 25. Israel acampaba en Sitim, en la región de Moab, y allí perdieron la cabeza con las chicas del lugar. Ellas le hicieron una invitación muy, muy tentadora… ¿Qué pasó entre ellos y las señoritas de Moab? (25:1 y 2). A todos nos encanta recibir invitaciones. Nos sentimos tenidos en cuenta y valorados, pero hay invitaciones ¡que matan! Imagínate qué contentos se pusieron los muchachos de Israel cuando las “simpáticas” y “tiernas” chicas de Moab fueron a invitarlos para una “fiestita privada”. ¡Era algo nuevo para ellos! Dios siempre les había prohibido, prohibido y prohibido, y ellos, pobres chicos de iglesia, no conocían nada de lo que era “divertirse en serio”. ¡Se la pasaban encerrados en sus aburridos templos! Pero, ahora, gracias a estos bomboncitos femeninos, ellos disfrutarían en serio. ¡Por fin libertad! ¡Y meta música no más… y cerveza…, y baile… y striptease… y sexo… y más sexo!…, ¡hot! ¡hot! ¡hot!… y sacrificios a los dioses paganos… y adoración a Satanás. ¡Guuaauuhh! ¡Qué fiestita, nenas! ¿Cuál fue el juicio de Dios para ellos? (25:3 al 5, 9). Dios no pacta con el pecado. Ya lo sabes. Él te dio la capacidad para evaluar a dónde ir y con quiénes ir, incluso cuando sales con tus amigos/as de la iglesia. No todas las invitaciones que recibes son buenas. Pregunta quiénes van, a dónde es, qué hacen. No sea que por querer probar “cosas nuevas” Dios tenga que “apretarte la cabeza” para aclararte un poco las ideas. ¡Desubicado total fue el que metió a la madianita en el campamento! (25:6). ¿Qué música metes en tu cabeza? ¿A qué videojuegos juegas? ¿Qué tipo de películas miras? ¿Qué revistas lees? ¿Cómo hablas cuando estás con tus amigos cristianos y no cristianos? Tú eres santo. No contamines tu vida. ¿Cuándo cesó la mortandad? (25:7 al 13). Dios limpió a su pueblo. Pero fue necesario que se levantara alguien con las cosas muy claras para frenar la matanza. Piénsalo. ¿Te dejas influenciar negativamente por los demás o eres de los que dicen: “Basta con esto, no lo hagamos porque deshonra a Dios”? ¿Eres de los que aceptan que otros te muestren tu error para corregirte o eres de los que dicen: “No pasa nada, está todo bien, sigamos haciéndolo”? ¿Qué tipo de música, películas, novelas, revistas, libros, series de anime o videojuegos necesitas “limpiar” de tu vida? ¿Cuando estas con chicos/as no cristianos tienes el valor para decirles: “Yo no participo de esto porque esta mal”, o “gracias por haberme invitado pero a esa hora tengo el encuentro del grupo en la iglesia”? ¿Te animas a cuidar más tu propia santidad que la amistad de tus amigos o contaminas tu vida para no perderlos a ellos? Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION ¿Puedes aceptar mi consejo? A veces creemos que somos lo suficientemente maduros como para confiar en nuestras propias decisiones por lo que, en lugar de agradecer un consejo, preferimos criticarlo o ignorarlo, hasta que los resultados nos demuestran lo contrario. Mejor es el muchacho pobre y sabio, que el rey viejo y necio que no admite consejos. Eclesiastés 4:13 La biblia nos menciona que es mejor ser un joven que es pobre, pero sabio, que un viejo que no desea ser aconsejado. Las experiencias que vivimos hacen que seamos más capaces y preparados de enfrentar la vida; sin embargo, podemos caer en el error de pensar que lo sabemos todo y no necesitamos la ayuda de alguien más, olvidando que existe mucho más por corregir y aprender de otros. Recuerdo que hace años cuando me acerqué a mi pastor solamente para hacerle una consulta, pero antes de que pueda emitir una palabra, él dijo: “Que bueno verte ¿podrías orar por mí?” En esa oportunidad quedé tan impresionada por su humildad, porque me acerqué a él sabiendo que era un hombre sabio, mas nunca imaginé que necesitaría oración de una persona que, en ese tiempo, no tenía mucha experiencia. “Porque Jehová es excelso y atiende al humilde, mas al altivo mira de lejos” (Salmo 138:6) Después de esa oportunidad solamente pensaba: ¡con razón Jehová lo atiende! ¡Con razón tiene lindas experiencias con el Señor! Porque Dios no lo mira de lejos, sino de cerca. El altivo no refleja amor, ni compasión, ni misericordia, porque él se pone en un elevado lugar y a su lado los demás son pequeños. Por lo mismo, no acepta un consejo, una corrección o algún tipo de ayuda. En este momento es necesario que analices si eres de las personas que acepta la corrección, de qué manera has recibido el consejo de alguien, si te cuesta pedir ayuda o que oren por ti. Si realmente quieres que Dios te mire de cerca, entonces, comienza a ser humilde, recuerda que al soberbio y altivo Dios los mira de lejos. ¡Un consejo no se critica, se agradece! Shirley Chambi CVCLAVOZ

lunes, 24 de noviembre de 2014

1 CORINTIOS 16:1-2 OFRENDA PARA LOS CRISTIANOS DE JERUSALEN

1 Corintios 16 : 1-2 La Biblia de las Américas (LBLA) Ofrenda para los cristianos de Jerusalén 16 Ahora bien, en cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también como instruí a las iglesias de Galacia. 2 Que el primer día de la semana, cada uno de vosotros aparte[a] y guarde según haya prosperado, para que cuando yo vaya no se recojan entonces ofrendas. 3 Y cuando yo llegue, enviaré con cartas a quienes vosotros hayáis designado[b], para que lleven vuestra contribución a Jerusalén. 4 Y si es conveniente que yo también vaya, irán conmigo. 5 Iré a vosotros cuando haya pasado por Macedonia (pues voy a pasar por Macedonia), 6 y tal vez me quede con vosotros, o aun pase allí el invierno, para que me encaminéis adonde haya de ir. 7 Pues no deseo veros ahora sólo de paso, porque espero permanecer con vosotros por algún tiempo, si el Señor me lopermite. 8 Pero me quedaré en Efeso hasta Pentecostés; 9 porque se me ha abierto una puerta grande para[c] el servicio eficaz, y hay muchos adversarios. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – MENOS ESPIRITUAL QUE UN ASNO Pasaje clave: Números 22 al 24. Los israelitas partieron del monte de Hor, conquistaron territorio enemigo (tierras de los amorreos y de Basán) y acamparon en los campos de Moab al borde del río Jordán. Aquí se desencadena una historia con cuatro protagonistas centrales: El rey de Moab, Balaam, una asna y Dios. Balac, Rey de Moab. Balac es una figura de Satanás. Al igual que Balac, Satanás tiene miedo de perder su territorio (el mundo con su cultura, sus modas, sus gustos, su estilo de vida) y a su gente (los pecadores oprimidos, perturbados, desconsolados, amargados y condenados al infierno). Cada vez que el pueblo santo de Dios (la iglesia) avanza y conquista nuevos territorios (personas salvadas, perdonadas, libres de culpas y miedos) ¡él se pone como loco! Al igual que Balac, su propósito es maldecir a los hijos de Dios. Tratarnos mal, despreciarnos, hundirnos, mentirnos. Hacernos sentir desvalorizados, fracasados, inútiles, enfermos, abandonados. Culpables de todo o víctimas de todo. Satanás es perverso. No lo trates con simpatía. No creas sus sucias mentiras. Él te odia. Pero su final está cerca. Él es un perdedor. Balaam. Esta persona no es lo que aparenta. ¡Ojo! Las apariencias engañan. No es lo mismo ser espiritual, que parecer espiritual. Éste sólo lo parecía. Balaam era codicioso y fue fácilmente seducido por la propuesta económica de Balac. ¿Cómo estoy tan seguro de esto? Porque si él no hubiese sido tentado por las propuestas de Balac, no les hubiera dicho a los enviados que se quedaran con él una noche más para ver qué le decía Dios. Él esperaba que Dios cambiara de idea y lo apoyara. Balaam sentía, además, que los mandamientos de Dios eran un obstáculo para su éxito (22:13, 18). Es como si él dijera: “Yo iría con ustedes pero Dios no me deja”. “No tengo problemas en maldecir al pueblo pero Dios no me da permiso”. ¿No decimos nosotros cosas parecidas? “Yo iría a bailar contigo pero en la iglesia no me dejan”. “Yo estaría en ese ministerio pero los lideres no me ponen”. Pero Balaam insiste (22:19). Tener intimidad con Dios, hablar con él o insistirle, no significa que Él cambie de ideas para quedar bien con nosotros y satisfacer nuestros caprichos. Balaam dejó de escuchar la palabra de Dios (24:1) y aunque Dios lo utilizó para bendecir a su pueblo, Dios no aprobó su vida (22:22). Dios puede usarte en ministerios pero no estar de acuerdo con tu vida, no aprobar tu corazón. El asna. ¡El asna fue más espiritual que el propio Balaam! ¡El asna pudo “ver” lo que Balaam no veía! Pudo “ver” que Dios no aprobaba la codicia del corazón de su dueño. Pudo “ver” el impedimento de Dios. Pero Balaam no veía nada. Por no hablar obedientemente con Dios termino hablando con un animal. El asna a la que tratamos de estúpida resultó ser más sabia que el profeta desobediente. ¡Te das cuenta cómo la desobediencia puede transformar a alguien en un asno incrédulo y estúpido! Piénsalo. Dios. Como siempre Él guardo a su pueblo. Él los bendijo. Él les tapó la boca a todos sus enemigos. Él es Dios. ¿Qué más podemos decir? Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Sin Dios Todos los días escuchamos y vemos noticias que nos estremecen y asombran; nadie puede negar que estamos viviendo los últimos tiempos, la maldad se está multiplicando y el amor se está enfriando, todo lo que está escrito en la biblia se está cumpliendo. Cuando uno se pregunta: ¿Por qué un ser humano puede lastimar y matar a una mujer, a un niño o a un anciano indefenso con tanta crueldad? La única respuesta que encontramos es porque esa persona no tiene a Dios en su vida y no lo teme. Olvidó el principal mandamiento que Jesús nos dejó: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo”. Lucas 10:27 (RVR 1960) Sólo Cristo es la solución, nadie más que Él puede llenar el vacío que uno tiene en su vida y curar las heridas de su corazón. En la mayoría de los casos son hombres y mujeres que no recibieron amor ni atención en sus hogares, que fueron maltratados, rechazados y abandonados por sus seres queridos, motivos por los cuales se refugiaron en el alcohol, las drogas y actos ilícitos. Dejemos de ser indiferentes al dolor ajeno y clamemos a Dios por todos aquellos que jamás escucharon acerca de Jesús, que no conocen cómo fue su vida, los milagros que realizó, ni el gran sacrificio que hizo en la cruz del calvario por amor a cada uno de nosotros. Es tiempo de interceder también por los que escucharon alguna vez de Él pero no decidieron seguirlo y por aquellos que sí lo recibieron como su Salvador pero que se alejaron de su camino por alguna razón. ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? Romanos 10:14 (RVR 1960) Hoy puede haber fiesta en el cielo y ser el día de salvación para todos ellos. Tal vez tú tienes a un familiar, a un amigo o conozcas a alguien que se encuentra en estas circunstancias, pide a Dios que su misericordia lo alcance y lo atraiga nuevamente a Él con amor; que use circunstancias, que hayan personas dispuestas a ir hasta donde él se encuentra y puedan compartirle el mensaje de esperanza y salvación que le ofrece Jesús pero también que te use a ti para clamar por su salvación y restauración. Para Dios ninguna persona es un caso perdido, Él más que nadie está interesado en que todos procedemos al arrepentimiento y seamos salvos. Cristo es la única solución a la contaminación del alma. Brisna Bustamante CVCLAVOZ

viernes, 21 de noviembre de 2014

1 CORINTIOS 11:23-26 LA CENA DEL SEÑOR

1 Corintios 11:23-26 La Biblia de las Américas (LBLA) La Cena del Señor 17 Pero al daros estas instrucciones, no os alabo, porque no os congregáis para lo bueno[f], sino para lo malo[g]. 18 Pues, en primer lugar, oigo que cuando os reunís como iglesia[h]hay divisiones[i] entre vosotros; y en parte lo creo. 19 Porque es necesario que entre vosotros haya bandos, a fin de que se manifiesten entre vosotros los que son aprobados.20 Por tanto, cuando os reunís, esto ya no es comer la cena del Señor, 21 porque al comer, cada uno toma primero su propia cena; y uno pasa hambre y otro se embriaga. 22 ¿Qué? ¿No tenéis casas para comer y beber? ¿O menospreciáis la iglesia de Dios y avergonzáis a los que nada tienen? ¿Qué os diré? ¿Os alabaré? En esto no os alabaré. 23 Porque yo recibí del Señor lo mismo que os he enseñado[j]: que el Señor Jesús, la noche en que fue entregado, tomó pan, 24 y después de dar gracias, lo partió y dijo: Esto es mi cuerpo que es[k] para vosotros; haced esto en memoria de mí. 25 De la misma manera tomó también la copa después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto cuantas veces la bebáis en memoria de mí. 26 Porque todas las veces que comáis este pan y bebáis esta copa, la muerte del Señor proclamáis hasta que El venga.27 De manera que el que coma el pan o beba la copa del Señor indignamente, será culpable del cuerpo y de la sangre del Señor. 28 Por tanto, examínese cada uno[l] a sí mismo, y entonces coma del pan y beba de la copa. 29 Porque el que come y bebe sin discernir correctamente el cuerpo del Señor, come y bebe juicio para sí. 30 Por esta razón hay muchos débiles y enfermos entre vosotros, y muchos duermen[m]. 31 Pero si nos juzgáramos a nosotros mismos, no seríamos juzgados. 32 Pero cuando somos juzgados, el Señor nos disciplina para que no seamos condenados con el mundo. 33 Así que, hermanos míos, cuando os reunáis para comer, esperaos unos a otros. 34 Si alguno tiene hambre, coma en su casa, para que no os reunáis para juicio. Los demás asuntos los arreglaré cuando vaya. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – PERDIDAS Y TRISTEZAS Pasaje clave: Números 20. Del desierto de Parán, viajaron hasta el desierto de Zin y acamparon en una región llamada Cades. Allí sufrieron la primer pérdida, ¿cuál fue? (20:1). De Cades viajaron hasta el monte de Hor y allí Moisés sufrió su tercera pérdida. ¿Cuál fue y por qué motivo? (20:22 al 29). Todos sufrimos pérdidas y todos vamos a sufrir pérdidas en algún momento de nuestras vidas. Hay pérdidas que son inevitables. Como en el caso de María y Aarón para Moisés. Eran sus hermanos, y más allá de lo mal que habían actuado algunos meses atrás, siempre estuvieron a su lado acompañándolo y apoyándolo. Dios le concedió a Moisés la bendición del afecto y la compañía de sus hermanos, pero ahora ellos morían. Fue inevitable. Y será inevitable también para nosotros ver partir a aquellos que amamos. No sabemos cuándo será ese día pero conviene que nuestro corazón esté preparado. Disfruta hoy de los que amas, ahora que los tienes con vida. Regálales flores ahora que pueden disfrutarlas, ¿de qué sirve llevárselas después a un cementerio? Háblales ahora que pueden escucharte, verte y estar a tu lado. Ora por ellos hoy. Bendícelos hoy. Disfrútalos hoy. Dales un beso y un abrazo hoy. Diles hoy que los amas. No hay nada que te impida hacerlo, excepto tu propio egoísmo o tus viejos rencores. ¿Están tus padres separados o ya no vives con ellos? ¿Qué te impide ir a visitarlos y compartir un tiempo con ellos? Todo lo que hoy puedas darles del amor de Cristo será un sano recuerdo en tu corazón cuando ellos ya no estén más. Hay otro tipo de pérdidas. Y a estas sí las podemos evitar. Son las perdidas espirituales y emocionales por desobedecer la Palabra Dios, por pecar o por ser incrédulos a sus promesas. Bendiciones perdidas, tiempo perdido, oportunidades perdidas, frutos perdidos, madurez y crecimiento perdidos. Puedes evitar estas pérdidas. Aprende a no actuar por impulsos, a no dejarte llevar por lo que sientes. Aprende a esperar en Dios. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Cantando bajo la lluvia En el año 1945, después de la segunda guerra mundial, Estados Unidos enfrentaba la crisis económica y social que atraviesa toda nación que ha estado involucrada en movilizaciones bélicas. El proceso de recuperación para el país del norte sería lento. Pero en medio de todos los problemas que habían, comenzaron a levantarse las artes dramáticas como nunca. Quizás porque era el único medio de distracción familiar con el que cualquier ciudadano común podía lidiar con la incertidumbre que había reinado en la nación durante los 6 años de guerra. Con la aparición del cine sonoro, todas las grandes obras de Broadway fueron llevadas poco a poco a la pantalla grande y entre todas las que se presentaron, en el año 1952, logró destacarse un largo metraje titulado Singin' in the Rain (Cantando bajo la lluvia). La cinta fue un gran éxito, pero todos los laureles que había ganado no se debían tanto a la trama, sino a una escena de baile en la cual, el actor Gene Kelly baila bajo la lluvia mientras canta la canción que da título al filme. Parte de la letra de la canción dice: Estoy cantando bajo la lluvia, sólo cantando bajo la lluvia. ¡Qué glorioso sentimiento! Estoy feliz de nuevo. Me estoy riendo de las nubes, tan oscuro allí arriba. El sol está en mi corazón y yo estoy listo para el amor. La tormenta puede asustar a todos, pero de la lluvia me rio yo. Camino por el carril con un estribillo feliz. Estoy cantando bajo la lluvia. Más allá del gran talento del protagonista y de la puesta en escena, la canción había logrado impactar la vida de muchas personas que aún saboreaban el temor que habían sufrido ante la amenaza de una invasión enemiga, pero que debían sobreponerse al miedo y enfrentar otro desafío, la crisis socio-económica. Pero el canto de un hombre enamorado a quien no le importaba mojarse con la lluvia, cautivó más de un corazón. Aquel audaz apasionado jugueteaba con cada chorro de agua que descendía de los tejados y zapateaba sobre cualquier charco de agua con el que se encontraba. La canción de Gene Kelly, llegó en un momento oportuno para mucha gente que se lamentaba, renegaba y se frustraba por su situación, logrando únicamente enredarse entre sentimientos de autocompasión que no les permitía ver la oportunidad que existe al enfrentar un nuevo desafío. La mayoría, ante cualquier problema, sólo huye y protesta. Pero ésta sola escena llenaba de alegría a cuanta gente la veía. Quizás por la reacción opuesta que tenía el personaje. Normalmente todos ante una fuerte tormenta deciden esconderse y escapar, pero no éste hombre, él es un loco que juega con la lluvia y se divierte. Y tú, ¿Cómo enfrentas la adversidad? Salmos 5:11-12 dice: “Pero alégrense todos los que en ti confían; Den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes; En ti se regocijen los que aman tu nombre. Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo; Como con un escudo lo rodearás de tu favor.” (RVR1960) A veces la lluvia cae en el momento más inesperado. La mayoría de la gente corre para cubrirse y protestar, pero tú podrías ser el loco que cante y baile, sabiendo que no estás solo, porque Dios es quien te acompaña. Héctor Colque CVCLAVOZ

jueves, 20 de noviembre de 2014

LEVITICO 23:2 LEYES DE LAS FIESTAS RELIGIOSAS

Levítico 23:2 La Biblia de las Américas (LBLA) Leyes de las fiestas religiosas 23 Habló el Señor a Moisés, diciendo: 2 Habla a los hijos de Israel y diles: “Las fiestas señaladas[a] del Señor, que vosotros habréis de proclamar como santas convocaciones, son éstas[b]: 3 “Seis días se trabajará, pero el séptimo día será día de completo reposo, santa convocación en que no haréis trabajo alguno; es día de reposo al Señor dondequiera que habitéis[c]. 4 “Estas son las fiestas señaladas por el Señor, santas convocaciones que vosotros proclamaréis en las fechas señaladas para ellas: 5 “En el mes primero, el día catorce del mes, al anochecer[d], es la Pascua del Señor. 6 “El día quince del mismo mes es la fiesta de los panes sin levadura para el Señor; por siete días comeréis pan sin levadura. 7 “En el primer día tendréis una santa convocación; no haréis ningún trabajo servil. 8 “Y durante siete días presentaréis al Señor una ofrenda encendida. El séptimo día es santa convocación; no haréis ningún trabajo servil.” 9 Entonces habló el Señor a Moisés, diciendo: 10 Habla a los hijos de Israel y diles: “Cuando entréis en la tierra que yo os daré, y seguéis su mies, entonces traeréis al sacerdote una gavilla de las primicias de vuestra cosecha. 11 “Y él mecerá la gavilla delante del Señor, a fin de que seáis aceptados; el día siguiente al día de reposo el sacerdote la mecerá. 12 “El mismo día en que meciereis la gavilla, ofreceréis un cordero de un año sin defecto como holocausto al Señor. 13 “La ofrenda de cereal será de dos décimas de un efa[e] de flor de harina mezclada con aceite, ofrenda encendida para el Señor, como aroma agradable, con su libación, un cuarto de hin[f] de vino. 14 “Hasta ese mismo día, hasta que hayáis traído la ofrenda de vuestro Dios, no comeréis pan, ni grano tostado, ni espiga tierna. Estatuto perpetuo será para todas vuestras generaciones dondequiera que habitéis. 15 “Contaréis desde el día que sigue al día de reposo, desde el día en que trajisteis la gavilla de la ofrenda mecida; contaréis siete semanas completas. 16 “Contaréis cincuenta días hasta el día siguiente al séptimo día de reposo; entonces presentaréis una ofrenda de espiga tierna al Señor. 17 “Traeréis de vuestras moradas dos panes para ofrenda mecida, hechos de dos décimas de un efa; serán de flor de harina, amasados con levadura, como primeros frutos al Señor. 18 “Junto con el pan presentaréis siete corderos de un año sin defecto, un novillo del ganado y dos carneros; serán holocausto al Señor, junto con sus ofrendas de cereal y sus libaciones, una ofrenda encendida como aroma agradable al Señor. 19 “Ofreceréis también un macho cabrío como ofrenda por el pecado y dos corderos de un año como sacrificio de las ofrendas de paz. 20 “Entonces el sacerdote los mecerá junto con el pan de los primeros frutos y los dos corderos, como ofrenda mecida delante del Señor; serán cosa sagrada del Señor para el sacerdote. 21 “En este mismo día haréis también una proclamación; habréis de tener una santa convocación. No haréis ningún trabajo servil. Estatuto perpetuo será para todas vuestras generaciones dondequiera que habitéis. 22 “Cuando seguéis la mies de vuestra tierra, no segaréis hasta el último rincón de ella ni espigaréis el sobrante de vuestra mies; los dejaréis para el pobre y para el forastero. Yo soy el Señor vuestro Dios.” 23 Otra vez el Señor habló a Moisés, diciendo: 24 Habla a los hijos de Israel y diles[g]: “En el séptimo mes, el primer día del mes, tendréis día de reposo, un memorial al son de trompetas, una santa convocación. 25 “No haréis ningún trabajo servil, pero presentaréis una ofrenda encendida al Señor.” 26 Y el Señor habló a Moisés, diciendo: 27 A los diez días de este séptimo mes será el día de expiación; será santa convocación para vosotros, y humillaréis vuestras almas y presentaréis una ofrenda encendida al Señor. 28 Tampoco haréis ningún trabajo en este día, porque es día de expiación, para hacer expiación por vosotros delante del Señorvuestro Dios. 29 Si alguna persona[h] no se humilla en este mismo día, será cortada de su pueblo[i]. 30 Y a cualquier persona que haga trabajo alguno en este mismo día, a esa persona la exterminaré de entre su pueblo. 31 No haréis, pues, trabajo alguno. Estatuto perpetuo será para vuestras generaciones dondequiera que habitéis. 32 Será día de completo reposo para vosotros, y humillaréis vuestras almas; a los nueve días del mes por la tarde, de una tarde a otra tarde, guardaréis vuestro reposo. 33 Y el Señor habló a Moisés, diciendo: 34 Habla a los hijos de Israel, y diles[j]: “El día quince de este mes séptimo es la fiesta de los tabernáculos[k]; se celebrará al Señor por siete días. 35 “El primer día es santa convocación; no haréis ninguna clase de trabajo servil. 36 “Durante siete días presentaréis al Señor una ofrenda encendida. El octavo día tendréis una santa convocación, y presentaréis al Señor una ofrenda encendida; es asamblea solemne. No haréis trabajo servil. 37 “Estas son las fiestas señaladas[l] del Señor que proclamaréis como santas convocaciones, para presentar ofrendas encendidas al Señor, holocaustos y ofrendas de cereal, sacrificios y libaciones, cada asunto en su propio día, 38 además de las ofrendas delos días de reposo del Señor, además de vuestros dones, y además de todos vuestros votos y ofrendas[m] voluntarias que deis al Señor. 39 “[n]El día quince del séptimo mes, cuando hayáis recogido el fruto de la tierra, celebraréis la fiesta del Señor por siete días, con reposo[o] en el primer día y reposo[p] en el octavo día. 40 “Y el primer día tomaréis para vosotros frutos de árboles hermosos, hojas de palmera y ramas de árboles frondosos, y sauces de río; y os alegraréis delante delSeñor vuestro Dios por siete días. 41 “Así la celebraréis como fiesta al Señor por siete días en el año. Será estatuto perpetuo para todas vuestras generaciones; la celebraréis en el séptimo mes. 42 “Habitaréis en tabernáculos[q] por siete días; todo nativo de Israel vivirá en tabernáculos[r], 43 para que vuestras generaciones sepan que yo hice habitar en tabernáculos[s] a los hijos de Israel cuando los saqué de la tierra de Egipto. Yo soy elSeñor vuestro Dios.” 44 Así declaró Moisés a los hijos de Israel las fiestas señaladas delSeñor. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – DIEZMOS Y OFRENDAS Pasaje clave: Números 18. Dios les da (y nos da) indicaciones muy claras acerca de los diezmos y las ofrendas. Los Diezmos… Diezmo significa: “la décima parte de algo”. Por ejemplo: Si alguien tenía 100 vacas, tenía que diezmar 10 vacas. ¿Cómo lo hacía? Muy fácil. Elegía las 10 mejores vacas, sin defectos ni enfermedades y las llevaba a los levitas. Con sus otras 90 vacas él hacia lo que quería. ¿Por qué recibían los diezmos los levitas? (18:21, 23 y 24). Además de administrarlos, ¿qué más tenían que hacer? (18:25-30). ¡La ley era igual para todos! Los levitas también tenían la obligación de diezmar a Dios, pero ¿cómo podían hacerlo si no trabajaban como los demás? Ellos le daban a Dios los diezmos de los diezmos. Por ejemplo: De las 10 vacas que recibían como diezmo ellos daban la décima parte, o sea, 1 vaca. Esa vaca era su diezmo. Y con las 9 restantes se hacían un buen asadito (vs.31). Tanto para los israelitas como para nosotros hoy, dar los diezmos, es obligatorio. El diezmo es de Dios. De todo el ingreso económico que tengas, el 10% entrégaselo al Señor. ¿Y cómo se lo entregas al Señor? Por medio de la iglesia. …Y las Ofrendas. La ofrenda es diferente al diezmo. Es voluntaria (Ex.25:1-2, 35:21-22, 29). Es generosa. No es dar dádivas ni sobras. (Ex.35:5-9, 36:3-7). Es la expresión de tu corazón. (Gn.4:3-5) Es semilla que siembras en el Reino de Dios y que da fruto (2º Co.9:6-11). Somos bendecidos para bendecir. Somos prosperados para dar. Además, todo lo que pones al servicio de Dios es tu ofrenda para Él. Si danzas, tu cuerpo es tu ofrenda para Dios. Si haces música, tu instrumento y tu talento son tu ofrenda para Dios. Todo lo que dediques a Dios es tu ofrenda para Él. Puede ser tu tiempo, tu dinero, cosas que tengas, tu voz, tus habilidades, tus talentos, tu creatividad, tus ideas, tu capacidad intelectual, tus oraciones, tus consejos, todo, absolutamente todo. Siembra en el reino de Dios y serás prosperado en todo. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra · REFLEXION La joya más valiosa Cuentan que algunos príncipes alemanes estaban alabando sus respectivas posesiones. Entre ellos estaba el piadoso duque Elberard de Vurtemberg, sin decir nada, escuchando cómo todos se jactaban de sus riquezas; uno exaltaba sus viñedos, otro sus bosques, un tercero sus minas y así sucesivamente. Al cabo de un buen rato se levantó Elberard, y dijo: “Soy un príncipe humilde y no me puedo comparar con ustedes. Sin embargo, tengo también una buena propiedad y si al andar en ella, por las montañas, me extravío y hallo a uno de mis súbditos, en su compañía puedo acostarme y dormir sin temor alguno. Esta compañía la considero como una joya real, de verdadero valor; pero tengo otra mejor y más preciosa, y es: que puedo descansar mi cabeza y mi corazón en el seno de mi Padre Celestial y en el pecho de mi Señor Jesús, seguro de que ni la muerte ni el diablo me pueden dañar en lo más mínimo. Mucha gente pasa su vida entera buscando tener más posesiones, alcanzar un nivel económico más alto, ser una persona sobresaliente; y desperdician sus días tratando de alcanzar ese objetivo, sin importar el costo que éste tenga. Muchas familias se han destruido por motivos económicos, herencias que tuvieron más valor que la misma relación entre hermanos, amistades que han terminado por buscar el interés propio, gente que no puede descansar tranquila, personas que por actos ilícitos viven pendientes de sus enemigos. La joya más valiosa que podemos poseer es la confianza en Dios, el poder vivir confiadamente, sabiendo que nuestras vidas están seguras en sus manos. Tener paz con Dios y con los hombres, sabiendo que si nos perdemos, como el duque Elberard, podemos estar confiados porque si importar con quién nos encontremos, podremos descansar. Has todo lo posible para estar en paz con todos, que tu vida sea recta delante de Dios y los hombres, así podrás vivir descansado, confiando en que Dios tiene cuidado de ti. “Confía en el Señor y haz el bien; entonces vivirás seguro en la tierra y prosperarás. Deléitate en el Señor, y él te concederá los deseos de tu corazón. Entrega al Señor todo lo que haces; confía en él, y él te ayudará”. Salmos 37:3-5 (NTV) Ningún tesoro material se compara con tener paz en el corazón, con poder descansar en Dios. No persigas las posesiones terrenales, mira mucho más allá. Ana María Frege Issa CVCLAVOZ

miércoles, 19 de noviembre de 2014

1 CORINTIOS 14:24-25 SUPERIORIDAD DEL DON DE PROFECIA

1 Corintios 14:24-25 La Biblia de las Américas (LBLA) Superioridad del don de profecía 14 Procurad alcanzar el amor; pero también desead ardientemente los donesespirituales, sobre todo que profeticéis. 2 Porque el que habla en lenguas[a] no habla a los hombres, sino a Dios, pues nadie lo entiende[b], sino que en su espíritu[c] habla misterios.3 Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación.4 El que habla en lenguas, a sí mismo se edifica, pero el que profetiza edifica a la iglesia.5 Yo quisiera que todos hablarais en lenguas, pero aún más, que profetizarais; pues el que profetiza es superior al que habla en lenguas, a menos de que las interprete para que la iglesia reciba edificación. 6 Ahora bien, hermanos, si yo voy a vosotros hablando en lenguas, ¿de qué provecho os seré a menos de que os hable por medio de revelación, o de conocimiento, o de profecía, o de enseñanza? 7 Aun las cosas inanimadas, como la flauta o el arpa, al producir un sonido, si no dan con distinción los sonidos, ¿cómo se sabrá lo que se toca en la flauta o en el arpa? 8 Porque si la trompeta da un sonido incierto, ¿quién se preparará para la batalla? 9 Así también vosotros, a menos de que con la boca[d] pronunciéis palabras inteligibles, ¿cómo se sabrá lo que decís[e]? Pues hablaréis al aire. 10 Hay, quizás, muchas variedades de idiomas[f] en el mundo, y ninguno carece de significado. 11 Pues si yo no sé el significado[g] de las palabras[h], seré para el que habla un extranjero[i], y el que habla será un extranjero[j] para mí[k]. 12 Así también vosotros, puesto que anheláis dones espirituales[l], procurad abundar en ellos para la edificación de la iglesia. 13 Por tanto, el que habla en lenguas, pida en oración para que pueda interpretar. 14 Porque si yo oro en lenguas, mi espíritu ora, pero mi entendimiento[m]queda sin fruto. 15 Entonces ¿qué? Oraré con el espíritu, pero también oraré con el entendimiento[n]; cantaré con el espíritu, pero también cantaré con el entendimiento[o].16 De otra manera, si bendices sólo en[p] el espíritu, ¿cómo dirá el Amén a tu acción de gracias el que ocupa el lugar del que no tiene ese don[q], puesto que no sabe lo que dices? 17 Porque tú das gracias bien, pero el otro no es edificado. 18 Doy gracias a Dios porque hablo en lenguas más que todos vosotros; 19 sin embargo, en la iglesia prefiero[r]hablar cinco palabras con mi entendimiento[s], para instruir también a otros, antes que diez mil palabras en lenguas. 20 Hermanos, no seáis niños en la manera de pensar; más bien, sed niños en la malicia, pero en la manera de pensar sed maduros. 21 En la ley está escrito: Por hombres de lenguas extrañas y por boca[t] de extraños hablare a este pueblo, y ni aun asi me escucharan, dice el Señor.22 Así que las lenguas son una señal, no para los que creen, sino para los incrédulos; pero la profecía es una señal, no para los incrédulos, sino para los creyentes. 23 Por tanto, si toda la iglesia se reúne y todos hablan en lenguas, y entran algunos sin ese don o son incrédulos, ¿no dirán que estáis locos? 24 Pero si todos profetizan, y entra un incrédulo, o uno sin ese don, por todos será[u] convencido, por todos será[v] juzgado; 25 los secretos de su corazón quedarán al descubierto, y él se postrará y adorará a Dios, declarando que en verdad Dios está entre vosotros. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – ¡REBELDES! Pasaje clave: Números 16. Surge un grave problema de rebeldía, una situación crítica para los líderes que tuvieron que enfrentarse a ella y la intervención de Dios para poner fin a ese descontrol. Los rebeldes no eran nenitos caprichosos, ni adolescentes enojados. No eran personas nuevas que aún no conocen las cosas de Dios, ni hermanitos recién convertidos que todavía no saben nada de la Palabra. ¡No! Eran príncipes del pueblo. ¡Líderes!. Formaban parte del consejo que se reunía con Moisés para tomar decisiones y algunos de ellos, además, eran levitas que servían en el Tabernáculo y tenían la responsabilidad de ministrar a la congregación. Estos rebeldes tenían un serio problema no resuelto: No aceptaban a los líderes que tenían ni los soportaban. Para ellos, Moisés y Aarón eran los menos indicados para liderarlos y guiarlos. ¿O acaso ellos mismos no eran líderes también? ¿No ministraban al pueblo? ¿No servían en el Tabernáculo? ¿Acaso no hablaba Dios por medio de ellos? Estas personas rebeldes querían más. No les alcanzaba con ser líderes, querían más autoridad, más poder, más reconocimiento, más control sobre todas las cosas y menos sujeción, menos dependencia de los líderes escogidos. Ellos, con sus comentarios, pusieron a todo el pueblo en contra de Moisés y de Aarón. Ellos no se sujetaron ni respetaron la autoridad de Dios quien había escogido y levantado a Moisés y a Aarón en el liderazgo. ¿Qué piensas de las actitudes de Moisés? Él era muy manso, pero se enojó muy fuerte contra la rebeldía de ellos. Les recordó que él no se había autoproclamado líder. Defendió su liderazgo porque sabía que Dios lo había escogido y levantado y los desafió a ponerse delante de Dios para que Él mismo confirmara quién había sido elegido. El juicio de Dios fue muy severo contra ellos. Tenían que ser ejemplos y modelos para el resto del pueblo, pero los contaminaron con su misma rebeldía y orgullo. ¡Murieron 14.700! Hay líderes que Dios no ha levantado, hacen lo que no deben y son pecaminosos. Obran por su propia cuenta. No son ejemplo ni modelo. Es necesario denunciar a estos líderes. Pero Dios protege al liderazgo que Él ha levantado y que obra de acuerdo a su voluntad. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION ¿Por qué no quieres un compromiso? Una joven mujer se enamoró perdidamente de un hombre quién le juró que la amaba con todo el corazón. Lamentablemente, él nunca quiso presentarla a su familia, no la incluía en sus metas futuras y por tanto, nunca fijaba fecha para la boda. Hasta que un día ella se cansó, esperó por mucho tiempo que este joven tomara la decisión de madurar y establecer una familia, pero descubrió que él solamente quería una relación, no un compromiso. Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Mateo 15:8 Seguramente que en su tiempo, aquella joven le reclamó a su pareja diciendo: ¿Por qué me dices que me amas, sino quieres comprometerte conmigo? Así como cualquiera de nosotros en su lugar lo haría ante alguien que dice amar pero no lo demuestra. Del mismo modo, debes saber que Dios hace una pregunta parecida, nuestro Señor nos hace un reclamo, y nos dice: ¿Por qué me llaman ustedes “Señor, Señor”, y no hacen lo que les mando hacer? Lucas 4:46 Son muchas las personas que dicen ser "Seguidores de Cristo"; sin embargo, ser un verdadero cristiano es más que simplemente "creer", significa ser discípulo de Jesús, encontrarse en una constante lucha para cambiar y parecernos más a Cristo, conocer su palabra y obedecerla, incluso dar la vida por ella. ¡Llevar su mensaje para que más personas se salven! El Señor declaró: "No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos" Mateo 7:21 En la actualidad son realmente muchos, los que sólo le dicen -"Señor, Señor"- pero pocos los que "Hacen la voluntad del Padre". Muchos dicen y no hacen, por tanto, no todos se irán al cielo. Por eso, pregúntate: ¿Por qué no quieres un compromiso? Examinemos nuestra vida, si realmente nos hemos comprometido con Dios o solamente somos como aquel hombre que mantiene una relación superficial. ¡Dile a Dios que lo amas con actos, no con palabras! Shirley Chambi CVCLAVOZ

martes, 18 de noviembre de 2014

HECHOS 18:7 PABLO EN CORINTO

Hechos 18:7 La Biblia de las Américas (LBLA) Pablo en Corinto 18 Después de esto Pablo salió de Atenas y fue a Corinto. 2 Y se encontró con un judío que se llamaba Aquila, natural del Ponto, quien acababa de llegar de Italia con Priscila su mujer, pues Claudio había ordenado a todos los judíos que salieran de Roma. Fue a ellos,3 y como él era del mismo oficio, se quedó con ellos y trabajaban juntos, pues el oficio de ellos era hacer tiendas. 4 Y discutía en la sinagoga todos los días de reposo, y trataba de persuadir a judíos y a griegos. 5 Cuando Silas y Timoteo descendieron de Macedonia, Pablo se dedicaba por completo a lapredicación de la palabra, testificando solemnemente a los judíos que Jesús era el Cristo[a]. 6 Pero cuando ellos se le opusieron y blasfemaron, él sacudió sus ropas y les dijo: Vuestra sangre sea sobre vuestras cabezas; yo soy limpio; desde ahora me iré a los gentiles. 7 Y partiendo de allí, se fue a la casa de un hombre llamado Ticio[b] Justo, que adoraba a Dios, cuya casa estaba junto a la sinagoga. 8 Y Crispo, el oficial[c] de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su casa, y muchos de los corintios, al oír, creían y eran bautizados. 9 Y por medio de una visión durante la noche, el Señor dijo a Pablo: No temas, sigue hablando y no calles; 10 porque yo estoy contigo, y nadie te atacará para hacerte daño, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad. 11 Y se quedó allí un año y seis meses, enseñando la palabra de Dios entre ellos. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – OFRENDAS “VEGETARIANAS” Pasaje clave: Números 15. Ofrendas vegetales. Eran ofrendas que acompañaban a las ofrendas principales y su propósito era hacer subir hasta la presencia de Dios un perfume agradable (vs.13). Si prestaste atención se las llama vegetales porque la harina, el aceite y el vino utilizados en ellas son productos derivados de ¡vegetales! Ofrendas de aroma agradable. Olor grato que sube delante de Dios y que tanto el nativo como el extranjero podían ofrecer. Ofrécele a Dios tu mejor ofrenda: tu vida en santidad y obediencia. Tu vida en confianza y fe. Es el mejor perfume delante de Dios. La ofrenda de pan. ¿Qué era y cuándo se ofrecía? (15:17 al 21). Jesús dijo que Él era el pan de vida y que todo aquel que comiera de él nunca más volvería a tener hambre y que comer de Él sería obtener la vida eterna. ¿Comiste de Jesús? En otras palabras, ¿lo invitaste a tu vida? Y si ya lo hiciste ¿estás en comunión con Él? ¿Vives de acuerdo a su voluntad? ¿Lo tienes presente en tus decisiones? ¿Te importa Jesús? Ofrenda por los pecados de ignorancia. Sí, los pecados de ignorancia (“por yerro con ignorancia”) también eran tenidos en cuenta. Aunque fueran por ignorancia igualmente eran pecados. ¿Qué ofrendas tenían que presentar si era la congregación la que pecaba por ignorancia? (15:24 al 26). En cambio, ¿qué sucedía con aquel que pecaba a propósito? (15:30-31). La expresión “ser cortada de en medio de su pueblo” no significa que agarraban a la persona pecadora a cuchillazos y la cortaban en pedacitos ¡no! No la mataban de esa manera. La sacaban fuera del campamento y la mataban a piedrazos. Esa persona entonces fue “cortada”, o sea, dejó de pertenecer al pueblo. Fíjate que en ambos casos, (pecado por ignorancia y pecado a propósito), lo que se juzga es la intención. Ambos son pecados, pero uno fue sin intención y la misericordia de Dios le dio una segunda oportunidad, mientras que el otro en cambio fue hecho con toda la mala intención y el juicio de Dios cayó sobre él. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION ¡No tengas miedo! Cada vez que el rey de Aram entraba en guerra con Israel, consultaba con sus funcionarios y les decía: “Movilizaremos nuestras fuerzas en tal y tal lugar”. Sin embargo, de inmediato Eliseo le advertía al rey de Israel diciéndole: “No te acerques a ese lugar, porque allí los arameos piensan movilizar sus tropas”. Varias veces le advirtió para que estuviera alerta en esos lugares. Esa situación disgustó mucho al rey de Aram, llamó a sus oficiales y les preguntó: -¿Quién de ustedes es el traidor? ¿Quién ha estado informándole al rey de Israel acerca de mis planes? -No somos nosotros -respondió uno de los oficiales-. ¡Eliseo, el profeta de Israel, le comunica al rey de Israel hasta las palabras que usted dice en la intimidad de su alcoba! -Vayan a averiguar dónde está para mandar soldados a capturarlo, -les ordenó el rey-. Luego le avisaron que Eliseo estaba en Dotán. Así que una noche, envió un gran ejército con muchos caballos y carros de guerra para rodear la ciudad. Al día siguiente, cuando el sirviente de Eliseo se levantó temprano, vió que había tropas, caballos y carros de guerra por todos lados. -¡Oh señor! ¿Qué vamos a hacer ahora? -gritó el joven a Eliseo. -¡No tengas miedo! -le dijo Eliseo-. ¡Hay más de nuestro lado que del lado de ellos! Luego oró: “Oh Señor, ¡abre los ojos de este joven para que vea!”. Así que el Señor abrió sus ojos, y cuando levantó la vista vio que la montaña estaba llena de caballos y carros de fuego. En ningún momento debemos dudar del poder de Dios, porque Él no conoce imposibles, abrió el Mar Rojo, detuvo el sol en Gabaón, protegió a Daniel en la fosa de los leones, no permitió que mataran a Eliseo ni a su siervo en esta historia. Siempre usa circunstancias y a personas para llevar a cabo sus planes y mostrarnos su amor, fidelidad, protección y poder. Entonces, ¿por qué seguimos dudando cuando enfrentamos alguna prueba? ¿Por qué permitimos que los problemas nos quiten la paz, el gozo y la esperanza? Debemos tener un nuevo estilo de vida, dejemos de ver para creer, primero creamos para después ver, porque sin fe es imposible agradar a Dios y recibir las bendiciones y los milagros que tanto anhelamos. Dejemos de sentir miedo e incertidumbre por el futuro, dejemos de preocupamos por encontrar una solución a nuestros problemas, acudamos primero a Dios, encomendemos nuestra vida a Él, entreguémosle nuestras cargas y clamemos por su intervención en cada una de las circunstancias que este día estamos atravesando. Con su ayuda todo saldrá mejor de lo que esperamos. Él es el Autor y Consumador de nuestra fe y es capaz aún de poner en nuestros corazones más amor y misericordia por aquellos que nos hacen daño, y enseñarnos a perdonarlos y bendecirlos en vez de querer su mal y vengarnos de ellos. Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio” 2 Timoteo 1:7 (RVR 1960) No permitamos que el temor nos paralice y nos impida experimentar milagros extraordinarios en nuestra vida y entorno. Dios jamás ha fallado a nadie que en Él ha creído y confiado. Brisna Bustamante CVCLAVOZ

viernes, 14 de noviembre de 2014

HECHOS 16:14 CONVERSION DE LIDIA

Hechos 16:14 La Biblia de las Américas (LBLA) Conversión de Lidia 11 Así que[h], zarpando de Troas, navegamos con rumbo directo a Samotracia, y al día siguiente a Neápolis, 12 y de allí a Filipos, que es una ciudad principal de la provincia de Macedonia, una colonia romana; en esta ciudad nos quedamos por varios días. 13 Y en el día de reposo salimos fuera de la puerta, a la orilla de un río, donde pensábamos que habría un lugar de oración; nos sentamos y comenzamos a hablar a las mujeres que se habían reunido. 14 Y estaba escuchando cierta mujer llamada Lidia, de la ciudad de Tiatira, vendedora de telas de púrpura, que adoraba a Dios; y el Señor abrió su corazón[i] para que recibiera lo que Pablo decía. 15 Cuando ella y su familia[j] se bautizaron, nos rogó, diciendo: Si juzgáis que soy fiel al Señor, venid a mi casa y quedaos en ella. Y nos persuadió a ir. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – ¿INCREDULOS NOSOTROS? Pasaje clave: Números 13 y 14. Diez príncipes (líderes) incrédulos y cobardes le presentaron al pueblo un informe pesimista y los asustaron: “No podemos, somos débiles, nos van a aplastar…, ¡somos langostas!.., ¡somos langostas!… ¡Quiero ir con mi mamá!…”. El pueblo no cree la promesa de Dios pero escucha atentamente la palabra de los príncipes y se descontrola: “Nos van a matar. Volvamos a Egipto. Nuestros hijos van a morir. Elijamos a un nuevo líder… ¡Queremos ir con mamá!” ¡Incrédulos! Se dejaron arrastrar por la opinión de las personas. Se dejaron llevar por sus propias dudas, por sus propios sentimientos de inferioridad. Le creyeron más a sus propias emociones de miedo e inseguridad que a la Palabra que tenían de Dios. Y se desata la tragedia. Dios no los soporta más y habla con Moisés para destruirlos ahí mismo. Es que Dios no soporta a los incrédulos. Me emociona la actitud de Moisés. Él sí tenia las ideas claras. En medio de tanto descontrol y locura, Moisés ora. ¿Qué le ruega a Dios y por qué? (14:13 al 19). Dios lo oye y perdona la incredulidad del pueblo, pero fue tan grave el pecado que los castiga severamente. No los destruye, pero vagarían por el desierto durante ¡40 años más! hasta que murieran en el desierto todos los mayores de 20 años. Pensar que si no hubieran sido incrédulos a la Palabra de Dios en unos pocos meses más podrían haber llegado a la tierra prometida. Es injusto que Moisés, Josué, Caleb y todos los menores de 20 años, tuvieran que sufrir 40 años más de desierto por culpa de miles de incrédulos, pero ellos también eran parte de aquel pueblo aunque no fuesen incrédulos. Es una decisión que tienes que tomar entre creer o no creer. Entre ser incrédulo o creerle a Dios. Si Dios te dice o te promete algo ¡créelo! Así de simple. No te dejes influenciar por lo que sientes, ni por lo que otros hacen, ni por las diferentes opiniones que escuches. ¡Créele a Dios! Decide creer Su Palabra. Ora Su Palabra. Métela en tu corazón y aférrate a ella hasta que sea parte de ti. Aprende a depender de Dios y no de tus cambiantes emociones. Dios no cambia. Él va a cumplir y a realizar en ti lo que prometio. ¡Créele! Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Tener fe y alimentarla Frederick Douglass fue escritor, editor, orador y ferviente defensor de los derechos de los afroamericanos negros. Su lucha lo llevó a ser uno de los más importantes disertantes abolicionistas de su época y de toda la historia de los Estados Unidos. Pero este hombre, conocido como El Sabio de Anacostia, no procede de la comodidad de una familia, ni de los círculos sociales acomodados. Douglass nació en la época de esclavitud total para su raza. El sistema al que estaba sujeto fue ideado en todos sus detalles para quebrar el espíritu de una persona, entre otras cosas: el individuo era separando de su familia para que nunca desarrollara vínculos emocionales, recibía constantemente amenazas y castigos con el único fin de aplastar toda noción de libre albedrío, además debía seguir siendo analfabeto e ignorante, para evitar que su pensamiento crezca. Todo esto con el fin de formar en el esclavo la peor opinión de sí mismo. El propio Douglass sufrió de niño todas esas desgracias pero, por algún motivo, desde su más tierna infancia, entre lágrimas de soledad dejaba volar su imaginación creyendo que podía ser libre y que podía aspirar a algo más. Él sentía dentro de su corazón que algo había sido aplastado, pero que podía levantarlo nuevamente. En 1828, cuando tenía diez años, su amo lo envió a trabajar a casa de un yerno en Baltimore, Maryland. Douglass interpretó esto como un acto de la providencia en su favor. Significaba que escaparía del arduo trabajo en la plantación y tendría más tiempo para pensar. En ese lugar, la señora de la casa leía continuamente la Biblia, y un día él le preguntó si podía enseñarle a leer. Ella lo complació con gusto y el muchacho aprendió rápidamente. Pero cuando el amo se enteró, reprendió severamente a su esposa: un esclavo nunca tendría permitido leer y escribir. Le prohibió seguir enseñándole. La señora de la casa simplemente asintió con la cabeza y ya no le enseñó más nada, pero ya era demasiado tarde, aquel niño ya podía arreglárselas por sí solo. La señora de la casa, simplemente dejaba algunos libros de pensadores y oradores tirados por ahí para que el niño los recogiera y pudiera leerlos a escondidas. Al tomarlos, escapaba a lo más recóndito de los cultivos de algodón y pasaba horas memorizando discursos famosos que repasaba en su mente. Se imaginaba convertido en un gran orador, clamando contra los males de la esclavitud. Cuando cumplió quince años, su amo se dio cuenta que era distinto a los demás esclavos en su expresión, su trabajo y hasta en su forma de andar, así que lo envió a una granja gobernada por un tal Covey, cuya única tarea en la vida era doblegar los espíritus rebeldes. Pero todas las artimañas que usaba ya no podían tener éxito. Douglass había creado una identidad propia, que no correspondía con la que Covey quería imponerle. Con el tiempo logró idear un plan para escapar al norte. Ahí fue donde creció como orador abolicionista importante, fundó su propio periódico y rebasó siempre los límites que los demás trataban de imponerle. Quizás nunca nos toque vivir las mismas dificultades que atravesó un afroamericano en la época de la esclavitud, pero en medio de nuestra propia adversidad, historias como las de Frederick Douglass, nos muestran como una persona que nació con un destino marcado y con un entorno hostil, puede salir adelante si cree y si alimenta constantemente esa creencia. “Repite siempre lo que dice el libro de la ley de Dios, y medita en él de día y de noche, para que hagas siempre lo que éste ordena. Así todo lo que hagas te saldrá bien. Yo soy quien te manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Señor y Dios, estaré contigo dondequiera que vayas.” Josué 1:8-9 Versión DHH La adversidad es una constante en la existencia del hombre, pero tener fe y alimentarla, es una variable que le toca a cada persona agregar a su vida. Héctor Colque CVCLAVOZ

jueves, 13 de noviembre de 2014

1 CORINTIOS 10:20 EJEMPLOS DE LA HISTORIA DE ISRAEL

1 Corintios 10:20 La Biblia de las Américas (LBLA) Ejemplos de la historia de Israel 10 Porque no quiero que ignoréis, hermanos, que nuestros padres todos estuvieron bajo la nube y todos pasaron por el mar; 2 y en Moisés todos fueron bautizados[a] en la nube y en el mar; 3 y todos comieron el mismo alimento espiritual; 4 y todos bebieron la misma bebida espiritual, porque bebían de una roca espiritual que los seguía; y la roca era Cristo[b]. 5 Sin embargo, Dios no se agradó de la mayor parte de ellos, pues quedaron tendidos en el desierto. 6 Estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, a fin de que no codiciemos[c] lo malo, como ellos lo codiciaron. 7 No seáis, pues, idólatras, comofueron algunos de ellos, según está escrito: El pueblo se sento a comer y a beber, y se levanto a jugar. 8 Ni forniquemos, como algunos de ellos fornicaron, y en un día cayeron veintitrés mil. 9 Ni provoquemos[d] al Señor[e], como algunos de ellos le provocaron[f], y fueron destruidos[g] por las serpientes. 10 Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y fueron[h] destruidos por el destructor. 11 Estas cosas les sucedieron como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos. 12 Por tanto, el que cree que está firme, tenga cuidado, no sea que caiga. 13 No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea común a los hombres; y fiel es Dios, que no permitirá que vosotros seáis tentados más allá de lo que podéis soportar, sino que con la tentación proveerá también la vía de escape, a fin de que podáis resistirla. 14 Por tanto, amados míos, huid de la idolatría. 15 Os hablo como a sabios; juzgad vosotros lo que digo. 16 La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la participación en la sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la participación en el cuerpo de Cristo? 17 Puesto que el pan es uno, nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan. 18 Considerad al pueblo de Israel[i]: los que comen los sacrificios, ¿no participan del altar? 19 ¿Qué quiero decir, entonces? ¿Que lo sacrificado a los ídolos es algo, o que un ídolo es algo? 20 No, sino que digo que lo que los gentiles sacrifican, lo sacrifican a los demonios y no a Dios; no quiero que seáis partícipes con los demonios. 21 No podéis beber la copa del Señor y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor y de la mesa de los demonios. 22 ¿O provocaremos a celos al Señor? ¿Somos, acaso, más fuertes que El? Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – DESUBICADOS Pasaje clave: Números 11. Una persona “desubicada” es aquella que está completamente fuera de lugar con las cosas que hace o dice. Estaba harto, cansado, fastidiado, molesto, casi enojado con Dios… y explotó. No aguantó más, no lo soportó más y se desahogó. No, no, no. No me refiero a ti cuando tienes problemas con tus padres, ni a tus padres cuando ya no saben qué hacer contigo. Estamos hablando de Moisés, ¿eh? ¿De qué maneras se estaba “desubicando” el pueblo de Israel y cómo reaccionó Moisés? El pueblo se desubicó contra Dios, pero también contra el liderazgo de Moisés. Porque Dios hablaba a través de él. Las quejas, los llantos histéricos, las amarguras y las depresiones del pueblo iban todas dirigidas a Moisés. Era él quien hablaba cara a cara con Dios. Era él quien presentaba delante de Dios la carga del pueblo. Y fue el propio Moisés quien no soportó más esta situación. A tal punto estaba estresado y agotado que le pidió a Dios la muerte. Este sí se quería morir en serio. El pueblo se levanto con sus quejas en contra de Dios y en contra de la persona que Él había levantado como líder. Fue lo peor que podrían haber hecho porque Dios descargó toda su furia a sobre ellos. ¿Te enojas contra tus líderes y pastores? ¿Te quejas de ellos en tus pensamientos o cuando hablas con otros? ¿Te quejas de la manera en que ellos hacen las cosas o de las decisiones que toman? ¿Eres consciente que mucha de la presión y del cansancio y de las cargas que ellos sienten o llevan es por tu vida, por tus depresiones, por tu malhumor, por tus decisiones apresuradas que acarrean problemas, por tus altibajos espirituales, por tus silencios y por lo que haces y no te bendice? ¡No te estoy manipulando para hacerte sentir culpable! Te estoy ayudando a pensar y a ver lo que tal vez no entiendes. ¿Eres suficientemente capaz de ver que ellos están jugándosela por ti para que seas formado a la imagen de Jesús? ¿Puedes ver que el propósito de ellos no es divertirte un poco los sábados por la noche sino guiarte a la madurez en todas las áreas de tu vida? ¿Cómo es tu actitud hacia ellos? ¿Qué hay en tu corazón por ellos? ¿A quiénes te pareces más en tus actitudes: al pueblo o a los príncipes escogidos? Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION El que persevera Alcanza Hace unos años, a un hombre en sus sesentas le fue ofrecido $200,000 dólares americanos por su motel, restaurante y gasolinera que había construido a través de toda su vida. Rechazó la oferta porque no quería jubilarse. Dos años después, cuando tenía 65 años de edad, construyeron una autopista que desvió el tráfico de donde estaba su negocio y, como consecuencia, perdió todo. La mayoría de personas a su edad hubieran tirado la toalla. Pero no este hombre. El sabía como cocinar pollo, así que tomó su viejo y deteriorado carro y empezó a viajar por todos los Estados Unidos, intentando vender su receta de pollo a otros restaurantes. Su recorrido fue difícil. He oído que su receta fue rechazada por más de 1,000 restaurantes hasta que, por fin alguien la quiso. A pesar de sus obstáculos, el hombre siguió hacia su meta y dentro de unos pocos años, había empezado una cadena de restaurantes por todo el país y por todo el mundo llamado Kentucky Fried Chicken. ¿Su nombre? Coronel Sanders. El que persevera Alcanza..! Una frase muy repetida, pero cuantas veces simplemente pasamos por alto el peso de esta verdad... muchos de nosotros tiramos la toalla y nos rendimos al primer intento fallido de nuestros proyectos de vida, metas, negocios, relaciones, estudios, etc. Levántate hoy y realza vuelo, no te des por vencido en el primer fracaso, segundo o tercero... Alguna vez escuche la siguiente frase: "Nuestra mayor gloria no está en no haber caído nunca, sino en levantarnos cada vez que caemos." Maravilloso Saber que tenemos un Padre fuerte que no nos deja solos y nos sotiene con Su diestra. Recuerda que el verdadero "Éxito" en los días que nos ha tocado vivir se encierra en "buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas." (Mateo 6:33) Isaías 26:3 Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. Santiago 1:25 Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. 2 Crónicas 26:5 El Rey Uzías: "Persistió en buscar a Dios, el cual era entendido en visiones de Dios; y en estos días en que buscó al Señor, él le prosperó" Filipenses 4:13 "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece"

miércoles, 12 de noviembre de 2014

APOCALIPSIS 9:20 LA SEXTA TROMPETA

Apocalipsis 9:20 La Biblia de las Américas (LBLA) La sexta trompeta 13 El sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz que salía de los cuatro[i] cuernos del altar de oro que está delante de Dios, 14 y decía al sexto ángel que tenía la trompeta: Suelta a los cuatro ángeles que están atados junto al gran río Eufrates. 15 Y fueron desatados los cuatro ángeles que habían sido preparados para la hora, el día, el mes y el año, para matar a la tercera parte de la humanidad[j]. 16 Y el número de los ejércitos de los jinetesera de doscientos millones; yo escuché su número. 17 Y así es como vi[k] en la visión los caballos y a los que los montaban: los jinetes tenían corazas color de fuego, de jacinto[l] y de azufre; las cabezas de los caballos eran como cabezas de leones, y de sus bocas salía fuego, humo y azufre. 18 La tercera parte de la humanidad[m] fue muerta por estas tres plagas: por el fuego, el humo y el azufre que salían de sus bocas. 19 Porque el poder de los caballos está en su boca y en sus colas; pues sus colas son semejantes a serpientes, tienen cabezas y con ellas hacen daño. 20 Y el resto de la humanidad[n], los que no fueron muertos por estas plagas, no se arrepintieron de las obras de sus manos ni dejaron de[o]adorar a los demonios y a los ídolos de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, que no pueden ver ni oír ni andar; 21 y no se arrepintieron de sus homicidios ni de sus hechicerías ni de su inmoralidad[p] ni de sus robos. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – SE MI GUIA Pasaje clave: Números 9:15-23 y 10. El grupo cristiano Guardian, en el tema “Sé mi guía”, dice: “Estoy harto de escuchar nadie a Dios quiere llamar Ya estamos todos listos Señor Jesús. Sé Tú la guía y ven a reinar. Sé mi guía y yo te sigo Guíame, Dios, yo te sigo. En tus pasos yo te seguiré. Sé mi guía y yo te sigo. Guíame, Dios, yo te sigo. ¿Cómo sabían los israelitas cuándo levantar campamento y marchar, y cuándo detenerse y acampar? Sí, la nube que cubría el tabernáculo los guiaba. Las trompetas de plata les avisaban de los peligros o los convocaban. Y el arca que iba delante de ellos les señalaba el camino. ¡Era imposible que le erraran! Si ellos se mantenían atentos al mandato de Dios no había manera de equivocarse en cuanto a dónde ir o cuándo hacerlo. Cuando Dios daba la orden ellos partían. Y cuando Dios daba la orden ellos se detenían y acampaban. Nadie hacia las cosas a su modo. Si algún delirante gritaba en medio del campamento: “¡Yo tuve una revelación, Dios me dijo que tenemos que irnos ahora!”, todos rápidamente miraban hacia el Tabernáculo y veían sobre él la nube de la presencia de Dios, quieta, inmóvil. En menos de cinco minutos a esa persona le hacían recuperar la cordura. No había lugar para delirantes. Si avanzaban y necesitaban saber en qué lugar acampar, delante de ellos iba el arca del pacto. El símbolo de la presencia de Dios buscándoles lugar de descanso. Y en muchas otras cosas Dios los guiaba por medio de Moisés. Piénsalo. ¿Te das cuenta? Si en vez de obrar por tu propia cuenta, tomando decisiones apresuradas, dejándote llevar por tus propios impulsos o por las “ideas” de tus amigos, lo pones a Dios delante de ti no puedes errarle en tus decisiones. Él te va a guiar hacia el lugar correcto, en el momento correcto y vas a ser bendecido. Sabemos que deseas muchas cosas para tu vida y son muchas las que te gustaría hacer o tener. Consulta con Dios. Busca la guía en su Palabra. Habla con hermanos espirituales que te orienten con la Palabra de Dios, ¡pero huye de los delirantes! Y no te apresures a tomar decisiones. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Como un bebé Cuando un niño va creciendo debe ir alimentándose de acuerdo a lo que su cuerpo le exige, cuando cumple aproximadamente los 6 meses debe comenzar a variar su alimentación con papilla, por ejemplo. El bebé no puede seguir solamente tomando la leche materna, pues ésta solamente le ayuda los primeros meses y ya después debe también recibir otras vitaminas y proteínas que le ayudarán en su crecimiento. Al igual que esta realidad, Dios hace una comparación acerca de nuestra vida espiritual y nuestro crecimiento como hijos de Dios. Tal vez algunos siguen tomando leche durante muchos años pues, por miedo o conformismo, no se animan avanzar y crecer. Se puede observar cómo varias personas que llevan años en la vida cristiana siguen en el mismo punto de partida, no ha existido avance ni frutos a lo largo del tiempo que están conociendo de Dios. ¿Eres uno de ellos? Es una buena oportunidad de preguntarnos si seguimos con el mismo grado y estatura con la que conocimos a Dios hace tiempo. Estamos esperando que todos nos sigan diciendo que hacer, no tomamos responsabilidades, retos e incluso no atendemos al llamado que Dios está haciendo. Nuestra fe es tan frágil por falta de alimento sólido que seguimos esperando que alguien ore y haga nuestro trabajo, cuando nosotros ya deberíamos estar aptos para enfrentar toda prueba y ser quienes enseñen a otros a crecer espiritualmente. “Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño; pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.” Hebreos 5:11-14 (RV-1960) Hoy te animo a que anheles ese alimento sólido, busca crecer más, no te quedes estático, no permitas que el conformismo o el temor te dejen abajo. Busca crecer y llegar a la estatura que Dios busca de ti. Es hora de madurar. Telma Céspedes CVCLAVOZ

martes, 11 de noviembre de 2014

APOCALIPSIS 14:11 LA SIEGA DE LA TIERRA

Apocalipsis 14:11 La Biblia de las Américas (LBLA) La siega de la tierra 14 Y miré, y he aquí una nube blanca, y sentado en la nube estaba uno semejante a hijo de hombre[h], que tenía en la cabeza una corona de oro, y en la mano una hoz afilada.15 Entonces salió del templo[i] otro ángel clamando a gran voz al que estaba sentado en la nube: Mete[j] tu hoz y siega, porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra está madura[k]. 16 Y el que estaba sentado en la nube blandió[l] su hoz sobre la tierra, y la tierra fue segada. 17 Salió otro ángel del templo[m] que está en el cielo, que también tenía una hoz afilada.18 Y otro ángel, el que tiene poder sobre el fuego, salió del altar; y llamó a gran voz al que tenía la hoz afilada, diciéndole: Mete[n] tu hoz afilada y vendimia los racimos de la vid de la tierra, porque sus uvas están maduras. 19 El ángel blandió[o] su hoz sobre la tierra, y vendimió los racimos de la vid de la tierra y los echó en el gran lagar del furor de Dios.20 Y el lagar fue pisado[p] fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre que subió hasta los frenos de los caballos por[q] una distancia como de trescientos veinte kilómetros[r]. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – ¡¿OTRA VEZ?! Pasaje clave: Números 5:1-4. No nos gusta que nos repitan mil veces lo mismo, y no seria necesario que lo hicieran si escucháramos y tomáramos en serio lo que nos dicen. Pero no siempre lo hacemos. Nos distraemos o nos “olvidamos rápidamente” de determinadas cosas, por ese motivo necesitamos volver a escucharlas “otra vez…” Y Dios vuelve, otra vez, a recordarle a su pueblo la importancia de la santidad. Otra vez el pecado. ¿A quiénes debían echar del campamento? (5:1-4). Imagínate a toda la iglesia reunida un domingo por la noche, entonces alguien dice: “Todos los que están viviendo en pecado, todos los que tienen hacia sus hermanos actitudes y reacciones que no bendicen y todos los que hablan mal y piensan mal acerca de alguien, los amargados y los que se enojan por nada, tienen que levantarse e irse afuera porque están contaminando la casa de Dios…”. ¿Cuántos quedaríamos adentro? Y tú, ¿en qué grupo estarías? ¿En los que se quedan o en los que se van? ¡Gracias a Dios que ahora no es como antes! Dios cambió su método desde que Jesús murió en la cruz por nosotros, aunque Él mismo no haya cambiado. Su rechazo y su enojo contra el pecado y contra todo aquello que no nos bendice y edifica es tan intenso como siempre. Otra vez Él busca en nosotros limpieza, santidad y frutos. Al que persiste en su pecado Dios mismo se encargará de “cortarlo” y “sacarlo” para que no contamine a otros, pero en ciertas ocasiones, los mismos pastores deben tomar la drástica decisión de expulsar de la congregación a aquellos que la destruyen. No participes de ningún pecado ajeno. Manténte puro. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION El Árbol de los Problemas El carpintero que había contratado para ayudarme a reparar una vieja granja, acababa de finalizar un duro primer día de trabajo. Su cortadora eléctrica se dañó y lo hizo perder una hora de trabajo y luego su antiguo camión se negó a arrancar. Mientras lo llevaba a casa, se sentó en silencio. Una vez que llegamos, me invitó a conocer a su familia. Mientras nos dirigíamos a la puerta, se detuvo brevemente frente a un pequeño árbol, tocando las puntas de las ramas con ambas manos. Cuando se abrió la puerta, ocurrió una sorprendente transformación. Su bronceada cara estaba plena de sonrisas. Abrazó a sus dos pequeños hijos y le dio un beso a su esposa. Posteriormente me acompañó hasta mi automóvil. Cuando pasamos cerca del árbol, sentí curiosidad y le pregunté acerca de lo que lo había visto hacer un rato antes. "Oh, ese es mi árbol de problemas", contestó. Sé que yo no puedo evitar tener problemas en el trabajo, pero una cosa es segura: los problemas no pertenecen a la casa, ni a mi esposa, ni a mis hijos. Así que simplemente los cuelgo en el árbol cada noche cuando llego a casa. Luego en la mañana los recojo otra vez. Lo divertido es, añadió sonriendo, que cuando salgo en la mañana a recogerlos, no hay tantos como los que recuerdo haber colgado la noche anterior... Mateo 6:34 Por tanto, no os preocupéis por el día de mañana; porque el día de mañana se cuidará de sí mismo. Bástele a cada día sus propios problemas. Mateo 6:25 Por eso os digo, no os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis o qué beberéis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que la ropa? Mateo 6:27 ¿Y quién de vosotros, por ansioso que esté, puede añadir una hora al curso de su vida? Lucas 10:41 Respondiendo el Señor, le dijo: Marta, Marta, tú estás preocupada y molesta por tantas cosas; Lucas 12:11 Y cuando os lleven a las sinagogas y ante los gobernantes y las autoridades, no os preocupéis de cómo o de qué hablaréis en defensa propia, o qué vais a decir; Lucas 12:22 Y dijo a sus discípulos: Por eso os digo: No os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. Filipenses 4:6 Por nada estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios. 1 Pedro 5:7 echando toda vuestra ansiedad sobre El, porque El tiene cuidado de vosotros.

lunes, 10 de noviembre de 2014

APOCALIPSIS 13:8,12,15 LA BESTIA QUE SUBE DEL MAR Y LA BESTIA QUE SUBE DE LA TIERRA

Apocalipsis 13:8,12,15 La Biblia de las Américas (LBLA) La bestia que sube del mar 13 El dragón se paró[a] sobre la arena del mar[b]. Y vi que subía del mar una bestia que tenía diez cuernos y siete cabezas; en sus cuernoshabía diez diademas[c], y en sus cabezas había nombres blasfemos. 2 La bestia que vi era semejante a un leopardo, sus pies eran como los de un oso y su boca como la boca de un león. Y el dragón le dio su poder, su trono y gran autoridad. 3 Y vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada. Y la tierra entera se maravillóy seguía tras la bestia; 4 y adoraron al dragón, porque había dado autoridad a la bestia; y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién es semejante a la bestia, y quién puede luchar contra ella? 5 Se le dio una boca que hablaba palabras arrogantes[d] y blasfemias, y se le dio autoridad para actuar[e] durante cuarenta y dos meses. 6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar su nombre y su tabernáculo, es decir, contra los que moran en el cielo. 7 Se le concedió hacer guerra contra los santos y vencerlos; y se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación. 8 Y la adorarán todos los que moran en la tierra, cuyos nombres no han sido escritos, desde la fundación del mundo, en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado[f]. 9 Si alguno tiene oído, que oiga. 10 Si alguno es destinado a la cautividad, a la cautividad va; si alguno ha de morir a espada, a espada ha de morir. Aquí está la perseverancia y la fe de los santos. La bestia que sube de la tierra 11 Y vi otra bestia que subía de la tierra; tenía dos cuernos semejantes a los de un corderoy hablaba como un dragón. 12 Ejerce toda la autoridad de la primera bestia en su presencia[g], y hace que la tierra y los que moran en ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada. 13 También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la tierra en presencia de los hombres. 14 Además engaña a los que moran en la tierra a causa de las señales que se le concedió hacer en presencia de[h]la bestia, diciendo a los moradores de la tierra que hagan una imagen de la bestia que tenía* la herida de la espada y que ha vuelto a vivir. 15 Se le concedió dar aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen de la bestia también hablara e hiciera[i] dar muerte a todos los que no adoran la imagen de la bestia. 16 Y hace que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les dé[j] una marca en la mano derecha o en la frente, 17 y que nadie pueda comprar ni vender, sino el que tenga la marca: el nombre de la bestia o el número de su nombre. 18 Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, que calcule el número de la bestia, porque el número es el de un hombre, y su número es seiscientos sesenta y seis[k]. Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Jovenes Cristianos – UN ASUNTO DE EDADES Pasaje clave: Números 4. ¡Y dale con la edad! El capitulo 4 de Números describe, detalle por detalle, cómo tenían que desempeñar su tarea los levitas, pero hay un dato que es para tener en cuenta: la edad. ¿Qué dice con respecto a la edad de los levitas que servían en el tabernáculo? (4:3, 23, 30, 35, 46-47). A partir de los 25 años ya podían servir en el tabernáculo de reunión, pero no podían servir en el ministerio. Para esto debían esperar hasta cumplir los 30 años. Y a partir de los 50 se “jubilaban”. Hoy no hay “una edad especial” para poder comenzar a servir a Jesús o para dejar de hacerlo, pero sí es necesario un compromiso serio, responsabilidad, dedicación, invertir tiempo, tener la mente y el corazón bien puestos en tu relación personal con Jesús. No puedes “jugar” a aceptar y no comprometerte, o a decir “si, cuenten conmigo” y a desaparecer después. Ten en cuenta que tus decisiones nos afectan a todos. Somos un cuerpo. Si tomas un compromiso y después te borras, dejas un hueco que no siempre es fácil de llenar, por lo tanto tus decisiones requieren madurez. Y para esto no necesitas tener una edad determinada, necesitas tener bien en claro el valor de tu relación personal con Jesús y a quién estás sirviendo. Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio” Por Edgardo Tosoni Un Encuentro Con la Palabra REFLEXION Sobrenatural El Diccionario de la Lengua Española define a un milagro como un suceso extraordinario y maravilloso que no puede explicarse por las leyes regulares de la naturaleza y que se atribuye a la intervención de Dios. Su raíz se encuentra en el latín miraculum que significa “mirar”. Los latinos llamaban miraculum a aquellas cosas prodigiosas que escapaban a su entendimiento, como los eclipses, las estaciones del año y las tempestades. Así entonces, miraculum proviene de mirari, que en latín significa “contemplar con admiración, con asombro o con estupefacción”. En la biblia encontramos muchos pasajes que nos relatan los milagros que Jesús hizo cuando estuvo acá, en la tierra. Todos nos quedamos asombrados y algunos de nosotros decimos que nos hubiera gustado estar en aquellos tiempos para presenciar al menos uno de ellos. Pero si analizamos con detenimiento todo lo que Dios hace diariamente en nuestras vidas, nos daremos cuenta que Él sigue haciéndolos, somos nosotros los que dejamos de maravillarnos, de asombrarnos y agradecerle por cada uno de ellos, porque los vemos como algo natural y normal cuando en realidad se trata del resultado de la intervención de nuestro Creador y no de la simple consecuencia de nuestro actos. 2 Reyes 4:42-44 menciona que cuando Eliseo volvió a Gilgal, no había qué comer en la región, y todos pasaban hambre. Un día, llegó un hombre de Baal-salisá, que le entregó veinte panes de cebada, hechos con harina de la primera cosecha, y además le dio trigo fresco en una bolsa. Eliseo le dijo a su sirviente: —Dale a los profetas para que coman. Pero su sirviente dijo: —¿Cómo hago para repartir esto entre cien personas? Eliseo le repitió: —Dáselos para que coman, porque Dios ha dicho: “Ellos van a comer, y aun sobrará”. Así que el sirviente les dio de comer, y tal como Dios había dicho, sobró comida. Al terminar de leer estos versículos di gracias a Dios porque como dice su Palabra en Hebreos 13:8 “Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre”, El no ha cambiado. Yo también pude experimentar dos milagros como éste en mi iglesia, estas últimas semanas. El primero fue una cena de evangelismo, en la cual invitamos a amigos y familiares para recordarles que Jesús los ama y que dio su vida para darles salvación. Aunque habíamos planificado todo y previsto los alimentos y los recuerdos necesarios para algunos invitados adicionales, le pedimos a Dios que no faltara nada y que más bien sobrara para compartir con otras personas más y así fue, esa noche pudimos ver la fidelidad de Dios en este evento. El segundo fue al celebrar el cumpleaños de nuestro pastor. Como era fin de mes, no contábamos con mucho dinero pero una vez más le encomendamos todo a Dios y le pedimos que el refrigerio y la torta alcanzaran para todos los que ese día estuvieran presentes, que ninguno se quedara sin comer. No entendemos cómo sucedió, pero Dios una vez más nos mostró su amor y nos sorprendió porque todos comieron y hasta sobró. No sé cuál es la situación por la que estás atravesando estos momentos, pero si sé que tenemos un Padre Bueno, Misericordioso y Poderoso, que si tú le crees, El es capaz de cambiar tus circunstancias y suplir todas tus necesidades. El es Jehová Jireh, nuestro Proveedor; si permaneces a su lado nada te faltará a ti ni a los tuyos. No seas de aquellos que solo ven milagros, experiméntalos en tu propia vida. Sigue creyendo y confiando en Dios porque jamás te desamparará. ¡No hay límites para su poder! Brisna Bustamante CVCLAVOZ