miércoles, 11 de diciembre de 2013

MIS CONOCIDOS

Job.19.13. Hizo alejar de mí a mis hermanos, Y mis conocidos como extraños se apartaron de mí. Job.19.14. Mis parientes se detuvieron, Y mis conocidos se olvidaron de mí. Job.19.15. Los moradores de mi casa y mis criadas me tuvieron por extraño; Forastero fui yo a sus ojos. Job.19.16. Llamé a mi siervo, y no respondió; De mi propia boca le suplicaba. Job.19.17. Mi aliento vino a ser extraño a mi mujer, Aunque por los hijos de mis entrañas le rogaba. Job.19.18. Aun los muchachos me menospreciaron; Al levantarme, hablaban contra mí. Job.19.19. Todos mis íntimos amigos me aborrecieron, Y los que yo amaba se volvieron contra mí. Job.19.20. Mi piel y mi carne se pegaron a mis huesos, Y he escapado con sólo la piel de mis dientes. Job.19.21. ¡Oh, vosotros mis amigos, tened compasión de mí, tened compasión de mí! Porque la mano de Dios me ha tocado. Job.19.22. ¿Por qué me perseguís como Dios, Y ni aun de mi carne os saciáis? Job.19.23. ¡Quién diese ahora que mis palabras fuesen escritas! ¡Quién diese que se escribiesen en un libro; Job.19.24. Que con cincel de hierro y con plomo Fuesen esculpidas en piedra para siempre! Job.19.25. Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo; Job.19.26. Y después de deshecha esta mi piel, En mi carne he de ver a Dios; Job.19.27. Al cual veré por mí mismo, Y mis ojos lo verán, y no otro, Aunque mi corazón desfallece dentro de mí. Sal.88.8. Has alejado de mí mis conocidos; Me has puesto por abominación a ellos; Encerrado estoy, y no puedo salir. Sal.88.9. Mis ojos enfermaron a causa de mi aflicción; Te he llamado, oh Jehová, cada día; He extendido a ti mis manos. Sal.88.10. ¿Manifestarás tus maravillas a los muertos? ¿Se levantarán los muertos para alabarte? Selah Sal.88.11. ¿Será contada en el sepulcro tu misericordia, O tu verdad en el Abadón? Sal.88.12. ¿Serán reconocidas en las tinieblas tus maravillas, Y tu justicia en la tierra del olvido? Sal.88.13. Mas yo a ti he clamado, oh Jehová, Y de mañana mi oración se presentará delante de ti. Sal.88.14. ¿Por qué, oh Jehová, desechas mi alma? ¿Por qué escondes de mí tu rostro? Sal.88.15. Yo estoy afligido y menesteroso; Desde la juventud he llevado tus terrores, he estado medroso. Sal.88.16. Sobre mí han pasado tus iras, Y me oprimen tus terrores. Sal.88.17. Me han rodeado como aguas continuamente; A una me han cercado. Sal.88.18. Has alejado de mí al amigo y al compañero, Y a mis conocidos has puesto en tinieblas. Luc.23.44. Cuando era como la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena. Luc.23.45. Y el sol se oscureció, y el velo del templo se rasgó por la mitad. Luc.23.46. Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y habiendo dicho esto, expiró. Luc.23.47. Cuando el centurión vio lo que había acontecido, dio gloria a Dios, diciendo: Verdaderamente este hombre era justo. Luc.23.48. Y toda la multitud de los que estaban presentes en este espectáculo, viendo lo que había acontecido, se volvían golpeándose el pecho. Luc.23.49. Pero todos sus conocidos, y las mujeres que le habían seguido desde Galilea, estaban lejos mirando estas cosas

No hay comentarios:

Publicar un comentario