jueves, 12 de septiembre de 2013

NUESTRA LIBERTAD

Lev.25.9. Entonces harás tocar fuertemente la trompeta en el mes séptimo a los diez días del mes; el día de la expiación haréis tocar la trompeta por toda vuestra tierra. Lev.25.10. Y santificaréis el año cincuenta, y pregonaréis libertad en la tierra a todos sus moradores; ese año os será de jubileo, y volveréis cada uno a vuestra posesión, y cada cual volverá a su familia. Lev.25.11. El año cincuenta os será jubileo; no sembraréis, ni segaréis lo que naciere de suyo en la tierra, ni vendimiaréis sus viñedos, Lev.25.12. porque es jubileo; santo será a vosotros; el producto de la tierra comeréis. Lev.25.13. En este año de jubileo volveréis cada uno a vuestra posesión. Sal.119.44. Guardaré tu ley siempre, Para siempre y eternamente. Sal.119.45. Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. Sal.119.46. Hablaré de tus testimonios delante de los reyes, Y no me avergonzaré; Sal.119.47. Y me regocijaré en tus mandamientos, Los cuales he amado. Isa.61.1. El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; Isa.61.2. a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; Isa.61.3. a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya. Luc.4.18. El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; Luc.4.19. A predicar el año agradable del Señor. Rom.8.19. Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Rom.8.20. Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; Rom.8.21. porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Rom.8.22. Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; Rom.8.23. y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. 1Co.8.7. Pero no en todos hay este conocimiento; porque algunos, habituados hasta aquí a los ídolos, comen como sacrificado a ídolos, y su conciencia, siendo débil, se contamina. 1Co.8.8. Si bien la vianda no nos hace más aceptos ante Dios; pues ni porque comamos, seremos más, ni porque no comamos, seremos menos. 1Co.8.9. Pero mirad que esta libertad vuestra no venga a ser tropezadero para los débiles. 1Co.8.10. Porque si alguno te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado a la mesa en un lugar de ídolos, la conciencia de aquel que es débil, ¿no será estimulada a comer de lo sacrificado a los ídolos? 1Co.8.11. Y por el conocimiento tuyo, se perderá el hermano débil por quien Cristo murió. 1Co.8.12. De esta manera, pues, pecando contra los hermanos e hiriendo su débil conciencia, contra Cristo pecáis. 1Co.8.13. Por lo cual, si la comida le es a mi hermano ocasión de caer, no comeré carne jamás, para no poner tropiezo a mi hermano. 1Co.10.25. De todo lo que se vende en la carnicería, comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia; 1Co.10.26. porque del Señor es la tierra y su plenitud. 1Co.10.27. Si algún incrédulo os invita, y queréis ir, de todo lo que se os ponga delante comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia. 1Co.10.28. Mas si alguien os dijere: Esto fue sacrificado a los ídolos; no lo comáis, por causa de aquel que lo declaró, y por motivos de conciencia; porque del Señor es la tierra y su plenitud. 1Co.10.29. La conciencia, digo, no la tuya, sino la del otro. Pues ¿por qué se ha de juzgar mi libertad por la conciencia de otro? 1Co.10.30. Y si yo con agradecimiento participo, ¿por qué he de ser censurado por aquello de que doy gracias? 1Co.10.31. Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. 2Co.3.14. Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque hasta el día de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual por Cristo es quitado. 2Co.3.15. Y aun hasta el día de hoy, cuando se lee a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos. 2Co.3.16. Pero cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará. 2Co.3.17. Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. 2Co.3.18. Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor. Gál.4.31. De manera, hermanos, que no somos hijos de la esclava, sino de la libre. Gál.5.1. Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud. Gál.5.2. He aquí, yo Pablo os digo que si os circuncidáis, de nada os aprovechará Cristo. Gál.5.3. Y otra vez testifico a todo hombre que se circuncida, que está obligado a guardar toda la ley. Gál.5.4. De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído. Heb.10.19. Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo, Heb.10.20. por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne, Heb.10.21. y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios, Heb.10.22. acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura. San.1.25. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. San.2.8. Si en verdad cumplís la ley real, conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, bien hacéis; San.2.9. pero si hacéis acepción de personas, cometéis pecado, y quedáis convictos por la ley como transgresores. San.2.10. Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos. San.2.11. Porque el que dijo: No cometerás adulterio, también ha dicho: No matarás. Ahora bien, si no cometes adulterio, pero matas, ya te has hecho transgresor de la ley. San.2.12. Así hablad, y así haced, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad. San.2.13. Porque juicio sin misericordia se hará con aquel que no hiciere misericordia; y la misericordia triunfa sobre el juicio. 1Pe.2.15. Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres insensatos; 1Pe.2.16. como libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios. 2Pe.2.17. Estos son fuentes sin agua, y nubes empujadas por la tormenta; para los cuales la más densa oscuridad está reservada para siempre. 2Pe.2.18. Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que verdaderamente habían huido de los que viven en error. 2Pe.2.19. Les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de corrupción. Porque el que es vencido por alguno es hecho esclavo del que lo venció. 2Pe.2.20. Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el primero. 2Pe.2.21. Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado. 2Pe.2.22. Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario