jueves, 24 de octubre de 2013

AGUARDAR

Sal.27.14. Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová. Luc.12.22. Dijo luego a sus discípulos: Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por el cuerpo, qué vestiréis. Luc.12.23. La vida es más que la comida, y el cuerpo que el vestido. Luc.12.24. Considerad los cuervos, que ni siembran, ni siegan; que ni tienen despensa, ni granero, y Dios los alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que las aves? Luc.12.25. ¿Y quién de vosotros podrá con afanarse añadir a su estatura un codo? Luc.12.26. Pues si no podéis ni aun lo que es menos, ¿por qué os afanáis por lo demás? Luc.12.27. Considerad los lirios, cómo crecen; no trabajan, ni hilan; mas os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió como uno de ellos. Luc.12.28. Y si así viste Dios la hierba que hoy está en el campo, y mañana es echada al horno, ¿cuánto más a vosotros, hombres de poca fe? Luc.12.29. Vosotros, pues, no os preocupéis por lo que habéis de comer, ni por lo que habéis de beber, ni estéis en ansiosa inquietud. Luc.12.30. Porque todas estas cosas buscan las gentes del mundo; pero vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de estas cosas. Luc.12.31. Mas buscad el reino de Dios, y todas estas cosas os serán añadidas. Luc.12.32. No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino. Luc.12.33. Vended lo que poseéis, y dad limosna; haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en los cielos que no se agote, donde ladrón no llega, ni polilla destruye. Luc.12.34. Porque donde está vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. Luc.12.35. Estén ceñidos vuestros lomos, y vuestras lámparas encendidas; Luc.12.36. y vosotros sed semejantes a hombres que aguardan a que su señor regrese de las bodas, para que cuando llegue y llame, le abran en seguida. Gál.5.5. Pues nosotros por el Espíritu aguardamos por fe la esperanza de la justicia; Gál.5.6. porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor. Gál.5.7. Vosotros corríais bien; ¿quién os estorbó para no obedecer a la verdad? Gál.5.8. Esta persuasión no procede de aquel que os llama. Gál.5.9. Un poco de levadura leuda toda la masa. Gál.5.10. Yo confío respecto de vosotros en el Señor, que no pensaréis de otro modo; mas el que os perturba llevará la sentencia, quienquiera que sea. Gál.5.11. Y yo, hermanos, si aún predico la circuncisión, ¿por qué padezco persecución todavía? En tal caso se ha quitado el tropiezo de la cruz. Gál.5.12. ¡Ojalá se mutilasen los que os perturban! Gál.5.13. Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros. Gál.5.14. Porque toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Gál.5.15. Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros. Gál.5.16. Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. Gál.5.17. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis. Gál.5.18. Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.

No hay comentarios:

Publicar un comentario